En este artículo, continuación de los cinco anteriores, Julieta Balart aborda los valores de segundo nivel que cubren las necesidades emocionales y corresponden según Barrett, a los niveles de conciencia de relaciones y autoestima. En las próximas publicaciones de la revista impresa Observatorio de Recursos Humanos se abordarán los siguientes niveles.
Como explica Balart, nos interesa tener en cuenta estos aspectos, porque las organizaciones exitosas son capaces de convertir cada trabajo en una misión puesto que han conectado con las emociones de las personas. En ellas, la inteligencia emocional es tan importante o más que la intelectual. La mayoría de las innovaciones las proponen los trabajadores más que los directivos y éstos se ocupan de crear las condiciones que alimenten la creatividad, ofreciendo un ambiente laboral que atienda a las necesidades físicas, emocionales y mentales.
Para leer el artículo completo, publicado en el número 113, pinche en este enlace.