En este contexto, la consultora de empresas familiares Family Business Solutions ha analizado cómo afectan las relaciones familiares y los problemas vinculados a la relación familia-empresa a los negocios regentados por familias.
Family Business Solutions ha detectado que buena parte de la mortalidad en las empresas familiares se debe a problemas familiares y en el relevo generacional, y no a problemas económicos y en la gestión del negocio como se podría pensar tras un contexto de crisis económica. Mezclar familia y empresa conlleva algunas dificultades relacionadas con el papel fundamental que juegan las emociones en este tipo de negocios, que se añaden a la ya de por sí difícil gestión de una empresa.
Entre estas dificultades familiares, Ricard Agustín, fundador de Family Business Solutions, destaca la mala comunicación, la falta de visión compartida, las peleas, las rivalidades, las luchas de poder, el trabajo intergeneracional y entre hermanos y primos, las diferencias de intereses entre los accionistas, y la presencia de familiares políticos y de familia extensa en el negocio, entre otros. Es en el momento del relevo generacional, cuando la generación anterior que actuaba como punto de equilibrio entre hermanos o primos sale del negocio, cuando estos conflictos suelen hacerse visibles o acentuarse, poniendo en riesgo la continuidad del negocio.
Agustín recomienda consensuar un Protocolo Familiar o unos Pactos de Familia para regular el relevo generacional y las normas que regirán la relación familia-empresa-propiedad en el futuro, así como planificar con tiempo la sucesión del negocio familiar. De esta manera, se pueden evitar, en la medida de lo posible, conflictos futuros, y se afrontará el cambio de liderazgo de la mejor manera posible.
Consejos para evitar y resolver los problemas familiares
Ricard Agustín, fundador de Family Business Solutions, aconseja a las familias empresarias seguir las siguientes recomendaciones para evitar y resolver los problemas familiares.
1. Mantener comportamientos empáticos y asertivos.
2. Compartir la información y ser transparentes, con el objetivo de generar confianza y mejorar la comunicación.
3. Tratar los conflictos en el lugar adecuado y “sin espectadores”.
4. Consensuar las normas de la relación familia-empresa, en un Protocolo Familiar o en unos Pactos de Familia, como parte del proceso de profesionalización de la empresa y de la familia.
5. Alinear la estrategia empresarial con la familiar (las expectativas de los socios familiares).