Retos y perspectivas laborales en el sector de la agricultura, la ganadería y la pesca

El sector de la agricultura, la ganadería y la pesca encara un periodo de cambios profundos, impulsados por factores como el aumento del coste de la vida, la inflación, la adaptación al cambio climático y la reducción de la huella de carbono. Analizar la ocupación por subsectores, la profesionalización de la fuerza laboral y las perspectivas de futuro resulta clave para anticipar los retos que plantea la transformación tecnológica, las brechas de competencias y las limitaciones en infraestructura y regulación. Este escenario obliga al sector a prepararse para integrar nuevas tecnologías, desde biotecnología y genética hasta detección óptica y automatización, y a replantear la formación y el desarrollo de talento en un contexto cada vez más competitivo y sostenible.
Perspectivas de futuro
Según un análisis de Randstad, en el horizonte de los próximos cinco años, la industria de agricultura, ganadería y pesca afrontará transformaciones impulsadas por factores económicos y ambientales, como el incremento del coste de la vida, la inflación, la adaptación al cambio climático y la reducción de emisiones. Sin embargo, su evolución se verá condicionada por limitaciones estructurales: la escasez de datos fiables, una infraestructura tecnológica insuficiente, regulaciones desactualizadas y carencias en habilidades especializadas.
El sector prevé un impacto creciente de tecnologías innovadoras, entre ellas la generación y almacenamiento de energía, la biotecnología y la genética, así como los sistemas de detección óptica y láser. Aunque actualmente se encuentra rezagado en la integración de tareas mixtas entre humanos y tecnología, se estima que para 2030 superará en cinco puntos porcentuales la media de automatización de otros sectores. Aun así, las proyecciones indican que las demandas formativas se mantendrán relativamente moderadas, lo que plantea un desafío en la preparación de la fuerza laboral para adaptarse a estos cambios.
El mercado de trabajo presente
Entender el punto de partida es fundamental para encarar los retos del futuro y saber con certeza el camino que debe recorrer el sector.
La agricultura, la ganadería y la pesca ocupan a un total de 759.000 personas registrándose un decrecimiento interanual del 0,4%, durante el primer trimestre de 2025.
Este sector está ampliamente dominado por agricultura y ganadería que, con 704.928 ocupados, representa el 93% del sector. Por su parte, silvicultura, pesca y acuicultura, con 53.811 ocupados, representa el 7% de la ocupación. El decrecimiento interanual del 0,4% en el primer trimestre de 2025 se debe principalmente a la disminución del 22,5% en silvicultura, pesca y acuicultura.
En el área de agricultura, ganadería y pesca predomina el empleo asalariado, representando el 63,8% de los ocupados, un porcentaje considerablemente inferior a la media de todos los sectores (85%). Por tipo de contrato, el 66% de los asalariados, en el primer trimestre de 2025, tenían un contrato indefinido, lo que indica que la temporalidad es considerablemente alta en la industria, con un 34% de los asalariados con contratos temporales.
En cuanto a la distribución de la ocupación por comunidades, en el sector de agricultura y ganadería, el empleo se concentra en dos comunidades autónomas: Andalucía, que agrupa un 34,6% de la actividad nacional, con 237.556 ocupados, seguida por Murcia con el 11,4%, con 77.887 ocupados.
Respecto al sector de silvicultura, pesca y acuicultura, la comunidad autónoma con mayor peso en el empleo es Galicia, que representa el 39,6%. Le siguen Andalucía con el 9,7% y Cataluña con el 8,1%.
El reto del relevo generacional
En este sector destaca el empleo en los grupos de edad más avanzados, especialmente entre 45 y 54 años, que alcanzan los 213.404 ocupados en el primer trimestre de 2025. Les siguen de cerca los ocupados de 55 años en adelante, con 207.763 ocupados.
Actualmente, el 56% del empleo en el sector se concentra en segmentos de edad de 45 años en adelante, mostrando una importante concentración del empleo en los grupos de mayor edad. El grupo de 35 a 44 años representa el 23% del total (175.783 personas). En el primer trimestre de 2025, el crecimiento interanual del grupo de 25 a 34 años fue del 10,7%, y el de los mayores de 55 del 7,4%, mientras que aquellos entre los 35 y los 44 años decrecieron un 9,8%.
El reto de profesionalizar el sector
El grupo de ocupados con estudios no profesionales representa tres cuartas partes del total, con un 75%, mientras que aquellos que tienen estudios profesionales encarnan cerca del 17% del empleo en el sector. En contraste, los ocupados con estudios universitarios constituyen una minoría, siendo solo un 9% del total.
Sin embargo, se observa una tendencia positiva en la creación de empleo. En el primer trimestre de 2025, el sector de agricultura, ganadería y pesca mostró un mayor crecimiento interanual en el grupo con estudios universitarios, que aumentó un 28%, alcanzando los 67.000 ocupados. Le siguió el grupo con estudios profesionales, que creció un 3%, hasta prácticamente alcanzar los 126.000 empleados. Por el contrario, el grupo con estudios no profesionales disminuyó un 4%.