Reducir la jornada laboral a 37´5 horas implicaría un aumento del 6% en los costes laborales de las farmacias

Las farmacias de toda España se enfrentan a uno de los periodos más desafiantes del año: el verano. A la dificultad para cubrir turnos por vacaciones, se suma ahora el creciente absentismo laboral en el sector sanitario –que supera el 10 % según Randstad y el INE–, y la presión de una posible reducción de la jornada laboral a 37,5 horas, lo que implicaría un aumento estimado del 6 % en los costes laborales, según la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE).
En paralelo, el personal de la farmacia figura entre los profesionales con menor tasa de suplencias durante el verano. Según datos del sindicato CSIF, en hospitales como el Regional de Málaga solo se cubrirá el 32,5 % de las bajas estivales, una tendencia que también afecta a las oficinas de farmacia, especialmente en zonas turísticas o rurales.
“Las titulares están sosteniendo la farmacia a costa de su salud y energía. Sin dirección ni planificación, el verano se convierte en una carga insostenible. Este no es un problema puntual, es un síntoma de una estructura que necesita rediseñarse con criterio”, afirma Fabiola Garmendia, consultora y mentora estratégica especializada en gestión sostenible de farmacias y fundadora de FarmaPad.
Las farmacias están obligadas por ley a mantener horarios mínimos de atención al público, lo que limita su capacidad de maniobra cuando hay bajas no cubiertas o falta de personal cualificado.
La consecuencia no es solo un sobrecoste económico, sino también un impacto directo en el servicio farmacéutico, la calidad asistencial y el bienestar de los equipos, con titulares agotados y sin tiempo real para dirigir su negocio con visión.
Desde FarmaPad, Fabiola Garmendia subraya que la solución no pasa únicamente por contratar más personal, sino por rediseñar la estructura del negocio, establecer roles y sistemas claros y anticiparse con decisiones estratégicas.
“Una farmacia no puede improvisar su verano. La planificación no es un lujo, es una necesidad. El futuro pasa por liderar con criterio, apoyarse en datos y crear estructuras que no dependan solo de una persona”, apunta.