por Antonio Martínez, responsable de la Dirección Corporativa de Personas en DomusVi.
El de los cuidados es un sector apasionante y hermoso, que se basa en la premisa de personas que están cuidando a otras personas. Asimismo, es uno de los que cuenta con más profesionales cualificados: prácticamente, la totalidad de la plantilla de cualquier organización del ramo. A la vez, el nuestro es un sector con una gran demanda de profesionales, empleando de forma directa a aproximadamente un 1% de la población ocupada en España.
Las proyecciones de envejecimiento poblacional vaticinan que esa cifra aumentará de forma exponencial. Según prevé el INE, en 2033 habrá cerca de 12,3 millones de personas mayores en España, lo que constituirá más del 25% de la población total. Para 2050, se prevé que el nuestro sea el cuarto país más envejecido de la UE: con 16 millones de personas mayores de 64 años, un tercio de la población. Así que, como sociedad, es importante invertir en esa gran variedad de perfiles que serán cada vez más necesarios para un mayor porcentaje de la población.
Este contexto redunda en que tenemos la misión de hacer avanzar un sector que se encuentra en un momento clave, pues ahora es el momento de tomar decisiones para poder hacer frente al gran reto demográfico del envejecimiento.
Apuesta por la profesionalización
Así, los operadores debemos afinar mucho para retener nuestro talento y ser capaces de generar y atraer a nuevo. Jóvenes en busca de un recorrido profesional que, tal vez, no se han detenido a pensar en trabajar en entornos muy dinámicos capaces de proporcionar a los usuarios entornos activos y estimulantes. Algo que pueden hacer desde una amplia diversidad de trabajos, pues el nuestro es un sector con una gran variedad de perfiles: desde médicos, DUES, psicólogos, TASOC, auxiliares de enfermería y gerocultores, a personal de limpieza, mantenimiento o recepción.
Aun así, la nuestra es una apuesta clara por la profesionalización del sector: nos movemos activamente para promover acuerdos de colaboración con universidades, escuelas de negocio o colegios de formación profesional, entre otros, para atraer al talento a nuestro sector. Actualmente, tenemos acuerdos prácticamente con todas ellas. Eso sí, sin desatender aquellos profesionales que no cuentan con las titulaciones oficiales, pero sí con la experiencia profesional. En este caso, impulsamos diversas vías de promoción y apoyo a la carrera.
Todo ello, claro está, se debe hacer sin perder jamás de vista cuál es nuestro objetivo fundamental, cuidar a personas, poniendo todo nuestro conocimiento, aptitudes y estructura al servicio de una mejor calidad de vida para ellas.
La formación es la clave
Para ello, es muy importante que los operadores del sector contemos con sólidos planes de formación, que son uno de los pilares para el desarrollo de nuestros profesionales. La formación debe estar presente en todas las etapas del profesional de los cuidados a las personas, desde su inicio, con un plan de acogida y durante todo el desarrollo de su carrera. Para retenerlo y sacar lo mejor de sí, al talento también hay que cuidarlo y estimularlo y hoy en día disponemos de una gran cantidad de formatos y canales para que, durante el año, las personas accedan a un amplio abanico formativo.
Pero, como decía antes, no se trata solo de retener talento, poniendo a su disposición todos los instrumentos para que se desarrolle, sino que una de las principales misiones de nuestro sector para hacer frente al incipiente reto demográfico es atraer nuevos trabajadores, echando mano de formación focalizada en la creación de empleo. En este caso, se trata de formaciones que se dirigen a personas desempleadas para que puedan obtener títulos oficiales dentro de las distintas especializaciones que el cuidado de las personas requiere, con un amplio compromiso, por nuestra parte, de contratación con los alumnos que han finalizado.
Ejemplo paradigmático de ello, dentro del necesario criterio de especialización y compromiso con la promoción del empleo juvenil, es el desarrollo de proyectos de FP Dual, en el que, debo decir, hemos sido pioneros con la firma de un convenio con la Consellería de Educación, para implementar la FP Dual con Doble Titulación en los Ciclos Medios de Cuidados Auxiliares de Enfermería y Atención a personas en situación de dependencia: el primer programa de este tipo en España.
