Que un empleado califique de “buen jefe” a su superior es sinónimo de que este es cercano, ‘se baja’ al barro para sacar al equipo adelante y, sobre todo, es un buen líder o gestor. Por lo menos, lo piensa así el 90% de los trabajadores en nuestro país.
Es más, el 30% considera que un buen estilo de liderazgo es el Democrático, donde el líder toma las decisiones tras fomentar la discusión del grupo, teniendo en consideración las opiniones de sus empleados. Mientras que tan sólo el 4% prefiere un liderazgo Autocrático, el jefe es el único que toma las decisiones en el grupo acerca del trabajo y la organización.
Tener un buen o mal jefe, hoy día, es muy importante para la felicidad laboral del trabajador. Las compañías, conscientes de la importancia de la felicidad laboral, centran sus políticas en atraer el talento en base a ideas como el liderazgo, oportunidades de desarrollo profesional, condiciones laborales de la empresa…
Consciente de esto, Adecco ha realizado la III Encuesta Adecco sobre Mejores Jefes y Empresas ahora que el próximo 20 de marzo se celebra el Día Internacional de la Felicidad. La compañía ha preguntado qué personalidades del mundo económico, la comunicación, deporte, espectáculo y panorama internacional serían los jefes ideales con los que trabajar para los empleados de nuestro país.
Rafa Nadal, que repite por tercer año consecutivo, es el jefe ideal para los españoles. Detrás del tenista balear se encuentran el expresidente estadounidense Barack Obama y, en tercera posición, el empresario Amancio Ortega, que vuelve a liderar la categoría empresarial y se ‘cuela’ en el ranking general de los más votados.
En lo que respecta a las empresas más felices para trabajar, también incluidas en la encuesta, las tres primeras posiciones son para Google, L’Oréal y Mercadona, respectivamente.
