El talento escasea, es efímero, está vivo… y a veces falla. Envejece cuando no se cuida bien, y puede morir de tanto usarlo… Mantenerlo vivo y fresco a lo largo de todas las etapas de la vida laboral necesita de un esfuerzo continuo y son las empresas y por ende, los departamentos de Personas, los máximos responsables de crear el entorno y facilitar los caminos para que el talento se mantenga ágil, actualizado y comprometido.
Natalia Arizcuren, Directora de Personas (antes llamado RR.HH.), explica en su artículo del número 111 por qué el talento falla y qué es lo ocurre cuando esto sucede. Pinche en este enlace si quiere visualizar el artículo.