Cada vez más son las empresas que deciden invertir en las redes sociales profesionales como herramientas para la comunicación interna de su empresa. Pero ¿qué herramientas tenemos a nuestro alcance? ¿Qué beneficios nos reportará implantar estas herramientas 2.0?
Todos conocemos el e-mail, seguramente el primer instrumento virtual en utilizarse en las empresas. Al ser el primero también empieza a presentar una serie de problemas que, con los cambios que se están produciendo en el entorno 2.0, resultan cada vez más engorrosos. Según Atos, el 48% de los directivos dicen estar estresados por la ingente cantidad de información que llega a sus bandejas. El correo electrónico se está convirtiendo cada vez más en un silo de información privada, es decir, no compartida. Nadie puede acceder a la bandeja de entrada de su compañero con lo cual es difícil promover la colaboración entre empleados. Además, en el proceso se pierde un tiempo que se podría invertir en otras tareas no tan administrativas.
Para ello han aparecido instrumentos que se adaptan mejor a este nuevo perfil colaborativo y social. Unas herramientas abiertas mucho más comunicativas y rápidas: Blogs, Wikis, foros internos, redes sociales profesionales, comunidades…, todo ello permite el trabajo en equipo y un seguimiento mayor de los proyectos por parte de los trabajadores al poderlos compartir en distintos grupos de trabajo.
Las redes sociales proporcionan un contacto directo del empleado con sus directivos y viceversa. La distancia que antes había entre ambos se reduce y el trabajador puede conocer mejor para quién trabaja y no sentirse tan alienado. También posibilitan un mejor seguimiento por parte de los departamentos de recursos humanos del talento que tienen en la empresa y que en otras circunstancias no serían capaces de ver.
Las redes sociales internas permiten acceder con mayor rapidez a la información corporativa y, por tanto, una atención al cliente más rápida y eficaz. Según Atos, la integración de las redes sociales en la empresa aumenta el tiempo útil del empleado, mejorando su productividad y su satisfacción ya que el tiempo que no invierten en cuestiones administrativas les permite una mejor conciliación de su vida laboral y familiar. En opinión de Francisco López, “al promover un ambiente de colaboración es más fácil obtener resultados creativos y nuevas ideas que son el motor principal de la actividad empresarial. Con estas estrategias bien aplicadas se ha podido comprobar que el aumento de los ingresos puede llegar a alcanzar el 10%”.
