Las redes sociales (como Twitter o YouTube), las plataformas MOOC (como Coursera o Udemy), el networking corporativo (Linkedin) o las aplicaciones que permiten conectar y colaborar (como Skype, Google Docs o Dropbox), se revelan como potentes herramientas de aprendizaje, tal y como ha explicado Jane Hart, fundadora del Centre for Learning and Performance Technologies (C4LPT), durante su intervención en la jornada «Innovando en el aprendizaje corporativo», organizada por la Universitat Oberta de Catalunya con motivo de la presentación de UOC Corporate.
«Hasta ahora, la universidad ha estado más centrada en el «saber» que en el «saber hacer», mientras que la empresa necesitaba know-how y profesionales que se adaptaran a los cambios del día a día». Antoni Cahner, gerente de la UOC, ha reivindicado la necesidad de superar esta fractura entre universidad y empresa explicando que UOC Corporate da un salto cualitativo en el acercamiento entre ambas para ayudarlas en este proceso de aprender a saber hacer, valorando cuál es el modelo de aprendizaje en línea más adecuado en cada caso, diseñando conjuntamente soluciones y acompañándolas en la implementación.
En la jornada, celebrada en la Antigua Fábrica Damm de la Ciudad Condal, se ha desarrollado una mesa redonda sobre los factores de éxito en el aprendizaje corporativo en la que han participado profesionales del Ayuntamiento de Barcelona, CaixaBank, Damm y Aqualogy. Maria Rodríguez, directora de Desarrollo del Ayuntamiento de Barcelona, ha destacado la importancia «de identificar muy bien las necesidades, el contenido y las metodologías más apropiadas de aprendizaje», tarea que realizan con el Sistema de Ordenación Municipal (SOM). Este sistema se basa en la asignación de funciones y competencias de cada puesto de trabajo: «Mediante una conversación anual entre profesionales y mandos se consensuan aspectos de mejora y se fijan objetivos y acciones. De este modo, los trabajadores se responsabilizan de su desarrollo», ha asegurado.
Uno de los retos a los que debe enfrentarse el Ayuntamiento de Barcelona es la incorporación de las nuevas tecnologías en una plantilla acostumbrada a la formación presencial clásica. En este contexto, Rodríguez consideró una «experiencia muy positiva» la colaboración con la UOC a la hora de impartir cursos de inglés semipresenciales.
Sílvia Ciurana, directora de formación de CaixaBank, ha hecho hincapié en el favorecimiento del desarrollo profesional y humano en beneficio de la estrategia empresarial: «Es importante acompañar el negocio desde la formación para ofrecer un buen servicio al cliente y para recuperar la confianza en el sector financiero». CaixaBank creó hace quince años Virtaula, una plataforma de aprendizaje en línea para facilitar el acceso a la formación y de apoyo a las tareas cotidianas. En estos momentos, uno de los principales desafíos que afrontan es el de adaptar el tipo de formación a los distintos perfiles profesionales: «Somos líderes en tecnología de aprendizaje, pero no abandonamos a la gente que necesita un manual para imprimir», ha afirmado Ciurana.
Del mismo modo, Francesc Mulero, HR Business Partner Manager de Damm, ha defendido la importancia de ajustar la formación a las diferentes generaciones y perfiles: «Es esencial adaptar la estrategia formativa a cómo son, por ejemplo, los miléniums». Asimismo, Mulero ha situado la compartición de conocimientos como un elemento primordial: «Un maestro cervecero no se hace fuera; se hace dentro de la compañía compartiendo conocimiento». En este sentido, ha destacado que un 20 % de la plantilla de Damm es formador interno.
«Tratamos la formación como un ecosistema con redes de aprendizaje, formación en el aula y socios universitarios como la UOC y la UPC», ha afirmado Maria Salamero, directora de la Escuela del Agua Aqualogy (Agbar). Con ambas instituciones han organizado el primer máster de Tecnología y Gestión del Agua en Línea: «Hemos rehecho el máster con la incorporación de ludificación, transmedia, píldoras en línea, vídeos… para potenciar el aprendizaje». «Nuestros cursos tienen un enfoque dual que combina la teoría con una parte muy práctica, como, por ejemplo, montar una válvula hidráulica».
Por último, un diálogo sobre innovación entre Lluís Torner, director del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) y Eudald Carbonell, director del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES), ha servido de colofón a la jornada.
Torner ha afirmado que «los buenos científicos son exploradores conectados con el futuro que prueban cosas radicalmente nuevas y cuestionan realidades. Pero la gente que tiene que probar cosas nuevas necesita que las organizaciones pongan recursos, capacidades y estructuras. Cuanto más mandas, más tienes que ayudar a desarrollarse a los profesionales que están más abajo». Mientras, Carbonell ha subrayado el valor que ha tenido el incremento de la sociabilidad en el desarrollo de las competencias del ser humano: «El hombre tardó medio millón de años en socializar el dominio del fuego y treinta en socializar el móvil».
