Muchos trabajadores durante el verano sólo consiguen alejarse de la oficina físicamente. Mientras su cuerpo está en casa, en la playa, la piscina, etc., su mente sigue pensando en proyectos, reuniones, tareas por hacer o cómo estarán llevando sus compañeros el trabajo diario. Durante estos meses, el sol no es el único que puede quemarte, no desconectar de tu empleo pueden convertirte en un auténtico profesional “achicharrado”.
Según explica Gonzalo Martínez de Miguel, director de Infova, existen varias premisas que debemos tener muy claras, si queremos disfrutar de una desconexión total de nuestros empleos durante el verano: