El mundo laboral se ha visto afectado de pleno por la pandemia originada por el coronavirus. Además de la parálisis en muchos sectores por los sucesivos estados de alarma, las bajas laborales por SARS-CoV-2covid, bien por contagio, exposición o por personal sensible, han hecho incrementar la tasa de Incapacidad Temporal en España hasta máximos históricos, llegando al 4,80% en 2020. “Si ya veníamos observando con preocupación en estos últimos años el empeoramiento de la ratio de ausencias laborales por motivos de salud, la pandemia no ha hecho sino agravar aún más la situación”, señala Juan Miguel Mesa, coordinador de Gestión de Salud y Absentismo Laboral de Umivale.
“Las horas perdidas por los procesos COVID-19 en cualquiera de sus modalidades, el colapso del sistema sanitario y otros efectos colaterales no pueden ser una cortina de humo para no ver el problema de fondo”, ha añadido Mesa. Por ello, con el objetivo de ofrecer herramientas a sus empresas mutualistas para optimizar su salud laboral y el absentismo, la mutua Umivale ha puesto en marcha el primer foro virtual de buenas prácticas, un espacio para que sus empresas protegidas puedan poner en común qué hacen y qué resultados pueden obtener en materia de salud laboral.
Se trata de un catálogo de experiencias y modelos de actuación de empresas que mantienen ratios de salud laboral y absentismo por debajo de la media de su sector “y además lo hacen de un modo sostenido en el tiempo, es decir, empresas que a priori están haciendo cosas mejor que la competencia o al menos eso arrojan sus datos”, apunta Mesa.
El catálogo, que pretende ser vivo y continuo, es el resultado de un estudio en el marco de la colaboración entre la mutua Umivale y el Instituto de Investigación en Psicología de RRHH, del Desarrollo Organizacional y de la Calidad de Vida Laboral (IDOCAL, dependiente de la Universitat de València). “Para lograr una muestra diversificada y representativa seleccionamos empresas de diferentes sectores, regiones y tamaño de plantilla. A partir de ahí realizamos una serie de entrevistas con las personas responsables de Recursos Humanos o Prevención de Riesgos Laborales y obtuvimos un total de 48 buenas prácticas que entendemos que pueden ser útiles para otras empresas de iguales características”, señala Tobias Hauth, responsable del área de investigación en psicología aplicada a la empresa de Umivale.
Las presentación de las buenas prácticas siguen siempre una misma estructura: identificar las características de la empresa que la ha implementado, describir detalladamente las actividades concretas dentro de dicha práctica y recoger la estimación y evaluación de los profesionales entrevistados sobre la eficacia de la práctica para lograr sus objetivos. “Un formato que entendemos ágil para que otra empresa de similares características pueda entender y evaluar de manera rápida la utilidad de una práctica para su contexto y proporcione la información relevante para poderla aplicar en su organización”, señala Hauth.
Según el catedrático emérito de Psicología Social y de las Organizaciones y director del estudio, José María Peiró, una buena práctica “es un conjunto de actividades desarrolladas por una empresa que, a la vista de su desarrollo y resultados, se pueden considerar eficaces para mejorar la gestión de la salud en sus organizaciones”. En este sentido ha remarcado que no se ha realizado una evaluación externa de la práctica por parte del equipo investigador, sino que el criterio básico para su inclusión es la del profesional entrevistado.
“El papel de la práctica no es el de generar una réplica en otra empresa sino ser fuente de inspiración para otras empresas”, ha añadido Peiró.
El objetivo principal del catálogo, que arrancará con las 12 primeras prácticas ya disponibles en umivale empresa, es proporcionar una plataforma para el intercambio de las empresas.
Del 17 al 27 de mayo la mutua tiene programadas ocho jornadas online para presentar a sus empresas mutualistas este proyecto, con el objetivo de agruparlas de manera territorial, y tiene previstas además cuatro jornadas técnicas para el segundo semestre de año para ir desgranando las utilidades de dicho catálogo y recopilando al mismo tiempo nuevas buenas prácticas que lo enriquezcan. Unas jornadas que pretenden ser un foro más para compartir y sumar.