En un contexto en el que las carreras de larga duración en una sola empresa han dejado de cautivar a Millenials y Generación Z, Nexian ha centrado su barómetro del mes de octubre en analizar las perspectivas profesionales de los más jóvenes, así como las tendencias de retención de talento en las empresas. De este estudio destacan 3 datos especialmente relevantes.
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El 65,6% de los trabajadores afirma que no existen políticas de promoción interna en sus empresas
La carencia de éstas no solo impacta en la retención del talento, sino que también tiene consecuencias económicas y estratégicas significativas para las empresas. Los datos recopilados indican que las compañías que carecen de estas políticas hacen frente a un aumento en los costes asociados a la rotación del personal.
La rotación constante de empleados no solo implica la pérdida de profesionales experimentados y capacitados, sino que también conlleva gastos adicionales en términos de reclutamiento, formación y adaptación de nuevos integrantes. Además, la competencia entre empresas por atraer a estos profesionales puede alimentar a las organizaciones rivales con recursos humanos valiosos.
Por este motivo, “la implementación efectiva de políticas de promoción interna no solo reduce la rotación del personal, sino que también fortalece la posición competitiva de una empresa” ha afirmado Patricia Gómez, directora de Comunicación y Experiencia Cliente de Nexian. Además, añade que “la posibilidad de ascender es, para muchos profesionales, un interés que supera a la posibilidad de teletrabajar o de los beneficios sociales”.
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El 18,3% de los empleados cree que promocionará de manera inminente
Estos empleados manifiestan también el impacto positivo que estas oportunidades de avance tienen en su motivación y productividad. La perspectiva de alcanzar metas y asumir desafíos profesionales tangibles actúa como un motivador poderoso, generando un sentido de propósito y compromiso en los trabajadores. Este aspecto no solo contribuye a la fidelización del personal, sino que también influye directamente en la eficiencia operativa de la empresa.
La anticipación de un ascenso a corto o medio plazo reduce significativamente la probabilidad de que los empleados busquen oportunidades fuera de la organización. Este fenómeno no solo protege la inversión en la formación y desarrollo de talento interno, sino que también se traduce en ahorros sustanciales para la empresa al evitar costosos procesos de reclutamiento y selección asociados a la rotación de personal.
“En este sentido, las políticas de promoción interna emergen como una estrategia integral que no solo beneficia al empleado individualmente, sino que también respalda los objetivos empresariales” añade Gómez.
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El 16% ha ascendido recientemente
Estos empleados no solo reflejan una mayor fidelización a la organización, sino que también exhiben características fundamentales que contribuyen positivamente al entorno laboral. El impacto de una promoción reciente se traduce en un periodo prolongado de lealtad y se revela como un activo más motivado y comprometido, manifestando una mayor responsabilidad hacia los valores, objetivos y tareas encomendadas por la empresa.
Contar con un plan de promoción interna, como destaca la experta de la compañía de recursos humanos Nexian, “tiene muchísimas ventajas, mientras que carecer de él no tiene ninguna”. No solo actúa como un mecanismo efectivo para retener y motivar al personal, sino que también se erige como una estrategia que potencia el rendimiento individual y colectivo, reforzando así la cultura empresarial y la productividad.