A nadie se le escapa que la pandemia ha marcado un antes y un después en las condiciones del puesto de trabajo en las organizaciones. La labor de forma remota –gracias a los entornos colaborativos– ha permitido continuar con las operativas diarias en los momentos más duros, y se ha convertido en una opción que ya forma parte del ADN de las empresas más innovadoras.
El éxito del teletrabajo se fundamenta en la utilización de infraestructuras y herramientas que permiten la comunicación y la colaboración entre los empleados. Tras unos primeros momentos de tanteo y despliegue rápido de soluciones, la consolidación del trabajo a distancia como salvavidas de esta larga pandemia ha llevado a las organizaciones a revisar su estrategia, e iniciar un proceso de selección más riguroso; buscando plataformas que se adecuen plenamente a sus necesidades de rendimiento, productividad y seguridad.
El objetivo es crear espacios en los que las empresas y los empleados puedan reunirse y construir comunidades profesionales. El reto en este proceso de elección es encontrar aquellas que permitan solucionar algunas consecuencias detectadas en el comportamiento de los empleados en teletrabajo. Se ha identificado en algunos casos menor lealtad y productividad, así como cansancio físico y mental que, incluso, se han llegado a materializar en enfermedades.
El enfoque que se dé al nuevo entorno colaborativo puede resolver esas situaciones y recuperar el compromiso de los empleados, que es un factor crítico para el crecimiento de las empresas. De hecho, en un informe reciente de Crayon e IDC se apunta que el 70% de las empresas que inviertan en compromiso del empleado recuperarán a finales de 2022 niveles de crecimiento previos a la Covid-19. Por su parte, solo el 30% de las que cuenten con programas débiles de engagement conseguirán los mismos resultados.
Dos obstáculos que impiden mejorar el compromiso
Los responsables de RRHH y Comunicación que participaron en la elaboración de este estudio apuntaron dos obstáculos principales, al ser preguntados sobre qué impide mejorar el compromiso de los empleados. Uno se refiere a que las comunicaciones provengan siempre “desde arriba”, con poca o ninguna posibilidad de retroalimentación por parte de los empleados. Y el otro es la utilización de herramientas de comunicación que no son pertinentes; y en concreto, reconocen la limitación del correo electrónico, ya que al ser demasiado formal, respecto a las RRSS, no es el adecuado para todo tipo de comunicaciones. A esto se une que son conscientes de que los trabajadores jóvenes tienen mayores expectativas respecto a la comunicación corporativa.
“En un informe reciente de Crayon e IDC se apunta que el 70% de las empresas que inviertan en compromiso del empleado recuperarán a finales de 2022 niveles de crecimiento previos a la Covid-19. Por su parte, solo el 30% de las que cuenten con programas débiles de engagement conseguirán los mismos resultados”.
El interés de las organizaciones por apoyar la colaboración entre sus empleados, y por tanto, trabajar a favor de su compromiso puede llevar a desplegar un exceso de herramientas colaborativas que terminan siendo un problema. Un entorno desbordado de aplicaciones confunde al empleado y limita su concentración al tener que utilizar varias. Este cambio continuo provoca interrupciones en su concentración pasando de una a otra. Y la concentración de los empleados es oro para las empresas.
Por eso, lo más recomendable es consolidar en una única plataforma las necesidades de comunicación y colaboración empresariales. Con una única solución, ya no es necesario compartir el mismo conocimiento en varias aplicaciones para asegurarse de que todo el personal reciba el mensaje.
Agilidad de uso y un ‘feedback’ continuo
Así que recopilemos, teniendo en cuenta lo apuntado hasta ahora. El entorno ideal de colaboración para impulsar el compromiso de los empleados es aquel que consolida en un único punto las comunicaciones, permite un feedback continuo desde todos los niveles de la empresa y ofrece la agilidad de uso de las RRSS.
Repasando el amplio abanico de soluciones existentes en el mercado, el reciente anuncio de integración entre Microsoft Teams y Workplace de Meta pone a disposición de las organizaciones una plataforma que cumple con los requisitos que acabamos de indicar. El valor de Teams es incuestionable, ya que se ha convertido en la herramienta de colaboración predominante en el mercado; pero sí que es verdad que, por su naturaleza, lo que se tiende con ella es a crear equipos separados. Su integración con Workplace rompe los límites profesionales y geográficos entre los empleados, sin importar en qué trabajen o dónde se encuentren. Todo lo que se publica en Workplace se publica automáticamente en Teams.
“El entorno ideal de colaboración para impulsar el compromiso de los empleados es aquel que consolida en un único punto las comunicaciones, permite un feedback continuo desde todos los niveles de la empresa y ofrece la agilidad de uso de las RRSS”.
Workplace lleva la frescura de la dinámica de comentarios, “me gusta” o emojis de las RRSS a Teams. Con esta herramienta es sencillo crear un ambiente inspirador de interacción informal con los empleados. Con la nueva integración, los usuarios pueden ver y reaccionar al contenido de Workplace sin salir de Teams. Una página de inicio de Workplace se ancla a la barra de navegación de Teams, de manera que todos pueden ver lo que se publica, reaccionar e interactuar.
Satisfacer las demandas profesionales y personales
Esta integración es un soporte básico para impulsar la comunicación interna dentro de la empresa. Sus responsables pueden utilizar Workplace para comunicados laborales, pero también personales, fomentando más la participación, la creación de grupos para diferentes intereses, lanzar concursos… El único límite es su imaginación.
En Crayon, por ejemplo, usamos Teams para la comunicación y la colaboración relacionadas con el trabajo. Para todo lo referido a actividades sociales en equipo, actividades divertidas e informales, usamos Workplace. Es decir, Microsoft Teams es el lugar para el trabajo en equipo y la colaboración en tiempo real, y Workplace de Meta es el centro de comunicación, cultura y cooperación a gran escala.
La suma de estos dos enfoques en plataformas reconocidas por el mercado permite satisfacer las demandas de los empleados como profesionales y como personas en el nuevo escenario de trabajo híbrido, ya sea en remoto o presencial. Que sientan el interés de la organización por su realización laboral y personal es la mejor estrategia para conseguir su compromiso.
José Manuel Marina,
director general de Crayon.
