El 15 de mayo termina el plazo de solicitud del bonus que premia a las empresas que consiguen reducir significativamente la siniestralidad y que incentivan la prevención de accidentes y enfermedades. El bonus consiste en un incentivo entre el 5 y el 10% en las cuotas pagadas por contingencias profesionales y si no se solicita, se pierde. “Muchas empresas que podrían beneficiarse del bonus de siniestralidad no lo hacen”, asegura Giovanni Grillo, Southern Europe Managing Director de la consultora internacional especializada en optimización de costes Lowendalmasaï.
Pueden solicitar el bonus todas las empresas que superen los 5.000 euros de aportación en cuotas por contingencias profesionales durante el periodo de observación y estén cubiertas por entidades gestoras o mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales. El incentivo está financiado por el Fondo de Prevención y Rehabilitación de las propias mutuas.
Además del cumplimiento de los índices de siniestralidad, las empresas deben atender a otros requisitos adicionales como la inversión en prevención de riesgos laborales, la inexistencia de sanciones graves durante el periodo de cálculo o estar al corriente de sus obligaciones en materia de cotización a la Seguridad Social, entre otros. La cuantía a recibir se determina en función del volumen de cotización por contingencias profesionales (5% de las cuotas pagadas por contingencias profesionales el primer año y 10% el segundo año consecutivo) y el límite corresponde al importe de las inversiones efectuadas por la empresa durante el periodo de observación.