El informe muestra que durante el segundo trimestre de 2018 las pymes han generado 316.822 puestos de trabajo, lo que supone un aumento del 8,8% respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se alcanzaron los 291.330 empleos.
Por tamaño de empresa, las compañías de entre 10 y 49 trabajadores son las que más empleos han generado, con 127.077. A continuación, se encuentran las que tienen entre 1 y 9 trabajadores y las de entre 50 y 249, con 108.263 y 81.482 puestos de trabajo, respectivamente. Si se compara con las cifras mostradas un año antes, se aprecia que tanto las empresas que disponen de 1 a 9 empleados y las de entre 10 y 49 han aumentado su peso respecto del total de pymes, mientras que las de más de 50 profesionales han reducido su peso en 0,9 puntos porcentuales.
El sector servicios vuelve a ser uno de los motores de crecimiento en las pymes. Durante el segundo trimestre del ejercicio, el sector terciario ha registrado un crecimiento del empleo interanual generado del 3,8% para el conjunto de las pymes.
Randstad Research y CEPYME también han estudiado cuáles son los sectores en los que se han reducido el número de puestos de trabajo. En términos anuales, las pérdidas de empleo registradas en las pymes se encuentran en 15 actividades y se cifran en más de 4.800 puestos de trabajo. Las actividades de seguridad e investigación son las que acumulan mayor pérdida de empleo, concentrando el 20% de las registradas en el conjunto de las pymes. Ocupando la segunda y tercera posición, están el sector pesquero, destacando las pérdidas registradas en las empresas de menor tamaño, y las industrias energéticas.
La ralentización de los ritmos de actividad económica prevista para 2018 y 2019 afectará al mercado laboral y reducirá los ritmos de creación de empleo. Las pymes crearán 600.000 puestos de trabajo. Más del 60% de estos nuevos empleos se generarán en 2018.
Los sectores que generarán nuevos puestos de trabajo variarán respecto a la estructura mostrada en años anteriores. El sector servicios continuará siendo el principal motor de actividad de la economía española y aumentará su importancia, aumentando su peso del 73,5% en 2017 al 87,4% en 2019, aunque los ritmos de creación de empleo se verán moderados y se reducirá del 3,9% registrado en 2017 al 2,7% estimado para 2019. En el caso del sector de la construcción, que ha liderado el crecimiento en 2017, la reducción del crecimiento será más pronunciada, pasando de 60.000 puestos de trabajo creados en 2017 a menos de 14.000 en el próximo ejercicio, situándose por debajo de las estimaciones de industria (14.059). En última posición, está agricultura que generará cerca de 2.000 empleos en 2019.