En momentos como el actual, los departamentos de recursos humanos se enfrentan a un nuevo reto: buscar fórmulas que permitan a sus trabajadores optimizar su retribución, sin aumentar la masa salarial. ¿Una utopía? CVA y ORH, en el marco de los Premios Internacionales SFS, organizaron el pasado 18 de noviembre el webinar «El escenario fiscal de la retribución en especie para favorecer el bienestar financiero y la conciliación», en el que se ofrecieron las claves para convertir este objetivo en una realidad.
El webinar, presentado por Marisa Cruzado, socia de CVA, contó con la intervención Félix Barajas, subdirector general de Diversidad Familiar del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, quién describió la situación en la que se enmarca la realidad financiera de las familias españolas.
A continuación, tres expertos, María Urgorri, Flex Manager de Edenred; Nuria Cebrián, socia de Ceszinkin; y Francisco Puertas, presidente de Hastee para España y Portugal, propusieron las diferentes alternativas desde el punto de vista de la retribución en especie, las excepciones fiscales y la cultura de salud financiera.
Ser flexible y sostenible ya no es una opción
Para Félix Barajas, «ser flexible o ser sostenible ya no es una opción; es una necesidad, especialmente, si lo que pretendemos es no acomodarnos, sobrevivir y sacar del cambio el máximo partido».
María Urgorri abordó la retribución en especie desde el escenario fiscal y dio una serie de consejos para configurar una política salarial que palíe los efectos de un IPC desbocado:
«El sistema que te permite motivar a tus equipos al ofrecerles beneficios sociales que les acompañarán en su día a día: comida, transporte público o escuela infantil, y les ayudará a incrementar su poder adquisitivo».
Los beneficios sociales que, según Urgorri, se consiguen son: más motivación, bienestar laboral, mayor compromiso y mayor retención y atracción del talento. Asimismo, explicó que estas soluciones se disfrutan de dos maneras:
- Como ayuda extrasalarial: como un plus a la nómina de los empleados, exento de IRPF, con lo que más valoran: comida, guardería, transporte, seguro médico y formación. La opción más rentable, según la experta.
- En un plan de Retribución Flexible: en el que el propio empleado decide qué parte de su salario recibe en especie, adaptando el beneficio a sus necesidades y obteniendo el máximo ahorro.
Bienestar financiero
Por su parte, Nuria Cebrián propuso algunas experiencias desde la práctica sin coste adicional para fomentar el bienestar financiero desde las empresas. Entre ellas, destacó:
- Actualización de convenios/acuerdos: para actualizar incrementos retributivos y para garantizar un mínimo vital en pensiones.
- Transformar beneficios: para cambiar conceptos retributivos obsoletos y financiar otros modelos de compensación.
- Fomento del ahorro: mediante instrumentos de previsión social que financien y fomenten la jubilación a una edad determinada, y con aportaciones mínimas de entre el 0,25 % al 1 %, ligadas a resultados.
- Sostenibilidad: vinculando el sistema de ahorro a la evolución económica de la empresas y ligando la sostenibilidad y la Responsabilidad Social Corporativa (RSC).
Transformación de la cultura organizativa
Francisco Puertas abordó cómo las empresas tienen que transformar la cultura organizativa para que todas estas medidas sean eficientes y tengan un sentido para empleados y organizaciones.
Para el directivo, «con la coyuntura económica actual, y con las dudas del ritmo retador del mercado laboral, tenemos dos importantes retos, a corto y medio plazo», que se vuelven cada vez más críticos:
- Productividad: Las empresas abogan por una mejora de su productividad para aumentar la rentabilidad de sus negocios.
- Nuevas demandas de los empleados: mayor salario y flexibilidad, teletrabajo y trabajo híbrido, mejora de las experiencias pasadas, herramientas ágiles, etc.
Aquí puedes ver el Webinar ORH completo 👇
Foto de Dan Cristian Pădureț en Unsplash
