Aceptar la imperfección de quienes nos rodean es demostrar tener una gran capacidad de adaptación. ¿La tienes tú?
Entradas relacionadas
20 diciembre 2019
Redacción
Tiempo de recordar
12 diciembre 2019
Redacción
The Time Shop
5 diciembre 2019
Redacción
Un comentario
Emilio Muñoz
5 febrero 2016 at 13:37
Mi experiencia, Cristina:
Aquel que es muy exigente consigo mismo, lo es con los demás.
Aquel que no ha aprendido a tomarse con naturalidad sus propios errores )aceptarlos sin reparos y con tranquilidad, subsanarlos y aprender a minimizarlos, si resulta conveniente) no sabra gestionar con naturaliad los errores de los demás.
Un abrazo.
Comentarios cerrados