Con la llegada del verano, se alargan los días, suben las temperaturas y se llenan las playas, pero a la hora de trabajar, nuestro ánimo sale por la puerta, lo cual no ha de sorprendernos. La idea de estar encerrado dentro de una oficina toda la tarde, mientras un sol espectacular brilla a través de la ventana, no es de agrado para muchos. A esto también hay que agregarle que las altas temperaturas pueden tener un efecto negativo sobre los procesos cognitivos. Según un informe del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, si los trabajadores sufren estrés térmico (malestar general debido al calor excesivo), se pueden reducir sus capacidades de percepción, atención y memoria.
Estas circunstancias deterioran el rendimiento laboral de nuestros equipos, y por ende, la productividad.
La situación es tan crítica que la Organización Internacional del Trabajo estima que el cambio climático provocará un daño irremediable a la productividad laboral, ocasionando una pérdida de horas de trabajo equivalente a 80 millones de puestos de tiempo completo para el 2030.
¿De qué forma podemos combatir esta crisis, con el fin de priorizar el bienestar de nuestros equipos? La flexibilidad laboral da en el clavo.
A continuación, exponemos los beneficios de implementar un ámbito laboral flexible, sobre todo durante el verano, y cómo llevarlo a cabo.
Flexibilidad laboral
La flexibilidad laboral busca acomodar las condiciones laborales que los empleados consideran como imprescindibles, con las necesidades fundamentales de los empresarios, favoreciendo así una mejor conciliación laboral y familiar, sin que esto impacte negativamente en el rendimiento.
Este enfoque no es novedoso, pero es más prevalente de lo que solía ser.
Un estudio realizado por la consultora Llorente y Cuenca (LLYC), en colaboración con la Organización Internacional de Directivos de Capital Humano (DCH), corrobora este dato. En él, se monitorizaron alrededor de 9,3 millones de mensajes, plasmados a través de las redes sociales, entre los años 2018 y 2022. ¿Los resultados? El 70% de la conversación social apuesta por la flexibilidad laboral y opina que conducirá a un futuro laboral más inclusivo, sostenible y saludable.
La flexibilidad laboral se adapta de diversas formas: para algunos empleados puede ser indispensable tener una jornada intensiva y finalizar el trabajo a las 3 p.m., para aprovechar la tarde, mientras que otros podrían trabajar una jornada estándar, pero prefieren hacerlo desde casa tres días a la semana, y así minimizar los desplazamientos a la oficina.
Algunas empresas tienen un enfoque por objetivos, mientras que otras se inclinan por un modelo de trabajo por horas. Pueden existir múltiples compaginaciones, las cuales deberán ser acordadas entre la empresa y el trabajador. Encontrar este punto intermedio que mantenga a ambas partes satisfechas puede propiciar una infinidad de ventajas.
Conciliación a todos los niveles
Según el informe de Randstad Employer Brand Research, el 65% de los españoles considera imprescindible una buena conciliación laboral-personal al elegir con qué empresa trabajar. La posibilidad de adaptar la hora, el lugar y la forma de cómo trabajamos según la necesidad peculiar de cada uno favorece que exista una mejor conciliación laboral, familiar y personal.
La perspectiva sana es trabajar para vivir, no vivir para trabajar. Es más, el estándar debería ser trabajar para poder vivir plenamente.
Ahora más que nunca es necesario priorizar un balance entre el trabajo y la vida personal. Poder dedicar tiempo al descanso, a la desconexión y a compartir con nuestros seres queridos, sin que esto implique un conflicto laboral, tendrá un efecto revitalizador en nosotros y por consiguiente, aumentará nuestro compromiso laboral, ya que será este sustento lo que nos permitirá vivir de una manera más plena.
A más flexibilidad, mayor felicidad
Ser libres nos hace felices y poder elegir de qué manera trabajar es un lujo que todos merecemos disfrutar. El trabajo ocupa un tercio de nuestros días, y si llega a convertirse en una fuente de frustración, puede disminuir significativamente nuestra calidad de vida y perjudicar nuestra salud mental. Con la implementación de una flexibilidad laboral, reducimos el absentismo laboral, eliminamos las barreras que impiden la realización de nuestro trabajo, disminuimos el estrés, cumplimos con nuestra labor en condiciones idóneas y nos podemos dar por satisfechos.
Mayor atracción y retención de empleados
Ya que existe una gran demanda por la inclusión de flexibilidad en el actual mercado laboral, incorporar esta modalidad en las ofertas de trabajo será un aspecto altamente atractivo para muchos. Por otra parte, la retención de empleados es un elemento clave para determinar el éxito de una empresa, puesto que su propósito principal es desarrollar el mejor talento posible que propulse el progreso de la compañía. Esto es más fácil de alcanzar si los empleados pueden lograr la conciliación, y a través de la flexibilidad laboral, esto es totalmente asequible. Una mayor retención del personal también es un indicador de un alto nivel de compromiso con la empresa, lo cual es ideal para fomentar un espacio colaborativo, productivo y estable.
Aumenta el rendimiento
La imposición de un horario específico o la obligación de acudir a un espacio determinado puede limitar y restringir la productividad de nuestros equipos. Al fin y al cabo, lo que funciona para uno, no necesariamente funciona para otro. Por ende, si determinamos el mejor momento del día, el mejor lugar y la mejor manera para llevar a cabo nuestras responsabilidades, estaremos garantizando que el trabajo sea ejecutado con una mejor atención y empeño.
Trabajar durante nuestros picos de productividad, a la hora que sea y en el lugar donde ocurra, potenciará un mejor rendimiento con mayor eficiencia a la hora de desempeñar nuestras funciones.
Asimismo, al estar satisfechos con nuestro trabajo, sentiremos una mayor motivación a la hora de gestionar nuestra carga laboral, lo cual reforzará nuestro compromiso, y esto a su vez favorecerá nuevamente nuestra productividad.
¿Cómo podemos implementar la flexibilidad laboral con nuestros equipos?
- Jornadas reducidas o intensivas
Librar los viernes o trabajar todos los días hasta las 3 p.m. puede ser una opción ideal durante el verano para que el trabajo sea más llevadero y asumible.
- Teletrabajo parcial o total
¿Tus empleados prefieren trabajar desde la playa? ¡Adelante! Ya no habrá que elegir entre una opción o la otra. Todo estará a nuestro alcance.
- Flexibilidad horaria
En vez de fijar un horario, los empleados tendrán la opción de distribuir las horas de trabajo como mejor les convenga. Recuerda: poder elegir nos da libertad y ser libres nos hace felices.
- Trabajo orientado a objetivos
La consecución de las metas se antepone a un horario predeterminado de gestión del trabajo. Esto incita a los empleados a sentirse más responsables y comprometidos con su trabajo.
Si echamos cuentas, adoptar este enfoque puede aportar un sinfín de beneficios y su implementación será un factor decisivo para el futuro de las empresas. Al fin y al cabo, solo el que se adapta, sobrevive. Por esto y más, apostemos por la flexibilidad laboral, que combate la rigidez del mercado laboral, promueve la adaptabilidad e impulsa la armonía entre las diferentes facetas de la vida. Y lo más importante: a través de ella, el éxito está garantizado.
Equipo de TherapyChat liderado por Aída Rubio, Head of Clinical Content de TherapyChat.
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