Las vacaciones no siempre son sinónimo de desconexión total del trabajo. La mitad de los españoles siguen atentos al móvil y al correo electrónico durante sus días de descanso en verano. En el caso de los profesionales freelance, el periodo estival conlleva el riesgo de perder oportunidades de negocio o de captar nuevos clientes, y de participar en proyectos con alta rentabilidad.