La Navidad es un momento especialmente propicio para poner en valor la Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Los mejores empleadores lanzan este año iniciativas en forma de cestas navideñas para las personas en riesgo de exclusión, cine solidario en familia, recogida de juguetes o donaciones de alimentos. Otras de las diversas buenas prácticas navideñas de las compañías más punteras son la colaboración con centros especiales de empleo para la preparación de las cestas de Navidad, talleres de colaboración con diversas causas o tarjetas de felicitación navideñas en forma de galletas solidarias.