El alcance de ese bienestar pasa por muchos factores que las empresas deben saber identificar y cuidar en un contexto extremadamente cambiante. Uno de ellos es una correcta gestión de la diversidad generacional existente en la mayoría de las compañías que, desde la incorporación de la ‘generación Y’ o millennials al mundo laboral, ha supuesto una revolución en los valores empresariales.