Hace años, las mayoría de las compañías, ante una baja maternal o baja por enfermedad, no barajaban la opción de contratación de otra persona como sustitución y solían repartir el trabajo entre la plantilla, aún en épocas de mayor volumen de trabajo. Por el contrario, en la actualidad, el número de contratos temporales para cubrir ciertas situaciones concretas es una tendencia al alza.