Actualmente, la situación de la Banca en España se caracteriza por la reducción del número de entidades y sucursales, la aparición de nuevos competidores, genéricamente llamados fintechs, y unas exigencias regulatorias muy elevadas. Asimismo, los avances tecnológicos y los cambios en el comportamiento del consumidor están propiciando el desarrollo de la relación digital. De hecho, casi todos los bancos se han fijado objetivos de número de clientes digitales. Hoy, según algunos datos, son el 30% de los clientes totales.