Los espacios de trabajo empiezan a cambiar y a adaptarse a una nueva generación que rechaza los despachos clásicos. Los empleados venideros prefieren espacios dinámicos, que permitan el trabajo en común y estén equipados con la última tecnología.
Grandes empresas como Google, Apple, Microsoft… han ayudado a revolucionar el concepto de oficina. Luz, color, espacios de juego, plantas, espacios creativos… esto es lo que demandarán los conocidos como knowmads que, según Raquel Roca, formarán el 45% de la fuerza laboral.
“El trabajador cada vez está menos en la oficina y cuando está, quiere sentirse lo más cómodo y a gusto posible. Cualquier empresa o emprendedor puede encontrar esto en los centros de negocios y coworkings. Espacios basados en la adaptación al cambio que permita adelantarse al futuro, porque cada empresa es única, y hay que tratarla como tal”, explica Roberto Zúñiga, responsable de expansión de OficinasYa.
Las empresas buscan, cada vez más, que sus empleados sean felices en sus puestos de trabajo.
El coworking es un modo de trabajo que no sólo reduce costes a las empresas sino que nos permite relacionarnos muy estrechamente con otras grandes mentes, todo ello aderezado con la flexibilidad que cada empresa necesita y una tecnología puntera e innovadora. Según los expertos, rodearse de grandes mentes, compartir ideas y pequeñas cosas te hacen feliz cada día y, consecuentemente, mejora tus resultados personales y laborales.
“El coworking aumenta la felicidad en los trabajadores lo que repercute en el aumento de su productividad”, asegura Zúñiga.
COWORKING BASADO EN TRES CONCEPTOS
- Tecnología de última generación.
- Espacio flexible que cambie con las necesidades de cada empresa y servicios como valor añadido.
- Aprovechamiento de espacios comunes enfocados al networking y al intercambio de ideas entre las diferentes empresas que lo conforman.