La rotación de plantillas es un tema recurrente y casi atemporal. Empleados que quieren abandonar sus puestos en busca de nuevas oportunidades laborales. Sin embargo, los motivos que los llevan a tomar esa decisión van variando con el paso de los años.
Llama la atención que, según Infoempleo y Adecco, sólo un 27,1% de los trabajadores esté contento con su actual puesto de trabajo y no se plantea cambiarlo. Este dato indica que el 72,9% restante tiene dudas acerca de su permanencia en la empresa.
El 19,6% está satisfecho con su empleo, pero no con las condiciones que lo acompañan, por lo que se encuentra en búsqueda activa de nuevas oportunidades laborales. Y el 14,2% cree que, a pesar de estar bien, en un tiempo querrá cambiar de trabajo.
El temor a perder el empleo actual es otra variable presente en la mente de los trabajadores. El 3,8% cree que puede quedarse sin trabajo porque su empresa no evoluciona de forma positiva. Y el 6,7% necesita buscar otro empleo porque su contrato finaliza próximamente y no cree que le vayan a renovar.
El descontento laboral hace mella en el 28,6%: el 16,5% busca empleo por este motivo; el 7,8% está insatisfecho, pero no tiene ganas en estos momentos de buscar activamente otras opciones; y al 4,3% le ha dejado de gustar su trabajo y busca un giro en su carrera profesional.
¿Por qué cambiar de empleo?
Entre las razones que pesan más a la hora de decidirse por un cambio de empleo, conciliar la vida profesional y la personal se mantiene a la cabeza (45,4%) doblando el porcentaje obtenido en 2020 (23,4%). Así como las oportunidades de desarrollo profesional (34,1%) y el ambiente de trabajo (30,9%).
El 28,7% valora el horario o tipo de jornada que tenga, el 24,9% prima contar con salario fijo y el 23,1% por disponer de un contrato indefinido, además de otras opciones menos valoradas como la ubicación de la empresa (15,3%), el descontento con el trabajo actual (10,7%) o las medidas de flexibilidad y opciones de teletrabajo que la empresa ofrezca (10,6%).
El salario es otro de los puntos donde los profesionales españoles no se sienten satisfechos. El 69,9% cree que su trabajo no está suficientemente remunerado, frente al 28,4% que se muestra contento con su sueldo, y un escaso 1,7% que dice percibir demasiado por el trabajo que realiza.
Un mal jefe, motivo suficiente para cambiar de empleo
Contar con un mal jefe es suficiente motivo para dejar un trabajo, según el 80,3% de los profesionales consultados. A la hora de valorar cómo sería un buen manager, el 82% cree que debería ser una persona con conocimientos especializados en el trabajo a desarrollar y a un 41,2% le gustaría también que tuviese conocimientos de management.
El 39,9% señala la cultura general como un “must” de un buen líder y el 32% considera que es imprescindible que maneje las nuevas tecnologías. En menor medida, el 9,3% los encuestados señala los idiomas como requisito para ser un buen jefe.
En cuanto a las habilidades interpersonales, la más valorada por los empleados en un líder es el trabajo en equipo (56,8%), seguido de la capacidad para organizar y planificar (41,2%), la facilidad para comunicarse (36,3%), la habilidad para resolver problemas (30,2%) y que muestre también honestidad y ética profesional (22,2%).
Los trabajadores también valoran la visión estratégica (16,3%), la empatía (16,2%), la autoridad (8,8%), la actitud positiva (8,6%) y saber delegar (7,7%).