La creciente transformación digital que actualmente está marcando el ritmo de muchas empresas está produciendo que la industria se enfrente a un gran número de cuestiones derivadas de los avances tecnológicos que experimenten. BDO, una de las mayores organizaciones globales de servicios profesionales, ha elaborado un informe en el que se presentan las 10 predicciones sobre tecnología que se sucederán a lo largo de este año.
El gran reto en 2019 para las empresas será abordar las problemáticas de privacidad y seguridad de datos e información, sin reducir la innovación y la experimentación, y sopesar los riesgos derivados de la transformación tecnológica frente a los beneficios.
En España, de acuerdo con otro informe elaborado por BDO en España, Expectativas y tendencias en la empresa española en 2019, las innovaciones tecnológicas se sitúan como el primer factor condicionante positivo para el 67% de las empresas.
Proliferación de nuevas tecnologías
La tecnología de quinta generación (5G) hizo su debut en 2018 cuando diversas ciudades norteamericanas albergaron las primeras redes con este tipo de conectividad para los usuarios. Sin embargo, se espera que su uso estandarizado se consolide en 2019. La tecnología 5G supondrá, no solo velocidades de procesamiento y descarga de datos más ágiles, sino que también incrementará la conectividad, la productividad, el número de dispositivos con conexiones Wi-Fi y la implementación de IoT por parte de las empresas, lo que les permitirá digitalizar sus procesos de fabricación.
El entorno actual, en el que prima preservar la confidencialidad y la protección de datos, está propiciando la rápida y generalizada implementación del blockchain. Esta herramienta es fundamental para las empresas, ya que su aplicación permite la protección de la información, la verificación de la identidad y el mantenimiento de registros de información de forma incorruptibles, aspectos esenciales en la trasformación tecnológica de las compañías.
La Inteligencia Artificial (AI) se presenta como otra de las grandes aplicaciones que proliferaran en las empresas y que cada vez adquiere mayor importancia. De hecho, el porcentaje de relevancia que los CFO le otorgaron en 2018 (28 %) aumentará este año. Esta, será una oportunidad para las compañías en la detección y la respuesta a los posibles ataques cibernéticos. No obstante, es cierto que también puede ser usada por el lado opuesto, es decir, ayudar a los ataques cibernéticos al proporcionar hacks automatizados que vulneren la seguridad de los datos.
La protección de datos y la ciberseguridad, los principales retos internacionales
Con la implementación de estas nuevas herramientas tecnológicas, la Unión Europea tiene ante sí el gran reto de establecer nuevas regulaciones para asegurar la correcta protección de datos. Según el análisis de BDO, el 52 % de los usuarios mundiales están preocupados por su privacidad en términos digitales. En España, la ciberseguridad es una de las prioridades estratégicas de 2019 para el 45 % de las empresas, según estudios elaborados por BDO. Organismos judiciales europeos, como el Tribunal de Justicia, ya han iniciado su actividad en este sentido tomando medidas contra grandes empresas tecnológicas, como Facebook o Google, por incumplir la regulaciones europeas vigentes.
Del mismo modo, se espera que en 2019 proliferen el número de organismos de EE UU encargados de velar por el cumplimiento de este tipo de regulaciones. Las grandes compañías no solo se verán regladas por estas normativas, sino también todas aquellas empresas emergentes, especializadas en drones, vehículos autonómicos, dispositivos IoT u otros desarrollos tecnológicos innovadores con el fin de que cumplan las regulaciones destinadas a proteger a los consumidores. Las compañías tienen grandes desafíos por delante, ya que se enfrentan a una creciente vigilancia por parte de las autoridades y una mayor competencia de las potencias extranjeras.
Al mismo tiempo, la situación geopolítica actual entre EE UU y China podría llegar a tener grandes consecuencias en la transformación tecnológica mundial. A corto plazo, BDO prevé que las disputas comerciales entre ambas potencias podrían llegar a provocar fluctuaciones en los avances tecnológicos, mientras que a largo plazo, las tensiones podrían afectar significativamente a las cadenas de suministro del sector tecnológico estadounidense.
En España, de acuerdo con el informe Expectativas y tendencias en la empresa española en 2019 elaborado por BDO, las innovaciones tecnológicas se sitúan como el primer factor condicionante positivo para el 67% de las empresas. Y para el 38%, la ciberseguridad es una prioridad estratégica en 2019. Para BDO, las empresas españolas son cada vez más conscientes de que el coste de un ataque es superior al de la protección preventiva, pero no todos incorporan ese riesgo a su plan de negocio, aunque sí se está modificando el tradicional modelo de seguridad hacia un enfoque orientado al crimen online y la ciberdefensa, con la implicación de todas las áreas de la empresa, más allá de la informática.
Transformación digital dentro de las empresas
Este proceso de cambios tecnológicos en las empresas es asumido por parte de todos los departamentos y profesionales de las compañías. Así, profesionales no vinculados directamente con aspectos tecnológicos, como los CEO, CMO o COO, son cada vez más conscientes de la necesidad de implicarse en estos procesos de cambio con el fin de mantener vivos sus negocios. Los datos del informe sobre predicciones tecnológicas de BDO, revelan que el 46 % de los empleados responsables de liderar las estrategias de trasformación digital se tratan de altos cargos, el 31 % son empleados de los departamentos de CIO e IT, el 15 % son integrantes del Comité de Dirección, el 5 % de la Junta Directiva y un 3 % son los responsables de las distintas unidades de negocio. De forma paralela, las empresas tecnológicas especializadas en este tipo de transformaciones se preparan para interactuar con una variedad mayor de profesionales y afrontan el reto de cómo explicar sus productos y servicios.
Al mismo tiempo, las empresas trabajan para abordar la brecha del talento. En este sentido, los avances en automatización, inteligencia artificial y aprendizaje automático (ML) no deben suponer un perjuicio, sino una nueva oportunidad para los empleados. Las empresas, con mayor frecuencia, ponen a disposición de los trabajadores programas de capacitación en temas tecnológicos.
Ejemplo de ello son los programas de empresas como Google, Microsoft o LinkedIn. Además, se espera que esta tendencia vaya a la alza durante 2019 mediante la asociación con otras instituciones educativas y administraciones públicas.
De acuerdo con el informe de BDO en España Expectativas y tendencias de la empresa española en 2019, la formación de los trabajadores, es una prioridad estratégica para el 36% de las empresas.
Además, BDO estima que en 2019 se incrementará la cooperación y colaboración entre compañías con el fin de obtener buenos resultados y beneficios mutuos por parte de todas las empresas tecnológicas emergentes. De esta manera, los beneficios de la cooperación y colaboración entre empresas contribuirá a mejorar la innovación, la exposición a nuevos mercados, el acceso a los recursos, mayores oportunidades de venta y mayor optimización de la cadena de suministro.
De acuerdo con los informes elaborados por BDO, las áreas de producción, administración, gestión y marketing, son aquellas más afectadas por la transformación tecnológica, y en el área de recursos humanos, la externalización de procesos (outsourcing) será el principal factor de cambio en 2019.
De forma interna, se espera que dentro de las empresas se fortalezca la importancia por el bienestar social y la Responsabilidad Social Corporativa. Ejemplo de ello es la colaboración entre Google, Microsoft y Amazon, que utilizan la Inteligencia Artificial para detectar y prever desastres naturales, sequias u otras catástrofes. Las nuevas prácticas tecnológicas que las empresas desarrollaran provocarán mayor interés de las empresas por su entorno social, aprovechando parte de su actividad para combatir las desigualdades sociales de su entorno.