Salvador del Rey, presidente del Instituto Cuatrecasas, ha inaugurado la sesión destacando que la Inteligencia Artificial es la más disruptiva y transversal de las nuevas tecnologías. “Su capacidad de alimentarse de los datos recogidos por las redes sociales o aplicaciones de Big Data y cualquier dispositivo conectado, capacita a esta tecnología a desarrollar nuevos procesos, automatizarlos e innovar en la toma de decisiones sin necesidad de que una persona lo programe, cambiando de forma relevante el contexto de los recursos humanos y de las relaciones laborales”.
Marta Martínez, presidenta de IBM, ha destacado que “La inteligencia artificial va a transformar el cien por cien de las profesiones. El gran reto del futuro no es la tecnología, sino el talento. Es nuestra preparación, como profesionales, empresas y sociedad, para desarrollar el conocimiento, las competencias y la confianza necesarias para aprovechar todo el potencial de una tecnología destinada, como ninguna otra hasta ahora, a aumentar las propias capacidades de nuestra inteligencia”.
Acto seguido, se ha celebrado una mesa redonda moderada por Guillermo Tena, director del Instituto Cuatrecasas, en la que han participado, además de Salvador del Rey, Marta Machicot, directora global de Recursos Humanos de Telefónica y Santiago Soler, secretario general de Adecco.
Los ponentes han concluido que la aparición y la incorporación de sistemas de inteligencia artificial en la empresa está generando, y generará aún más en los próximos años, una especial transformación en las formas de trabajo en las empresas, ya que no solo permiten realizar tareas a los trabajadores fuera de la oficina, y por tanto fuera de los horarios laborales, sino que se hacen cada vez más necesarios nuevos modelos de relación entre la compañía y el trabajador. Las herramientas y aplicaciones de Inteligencia Artificial suponen un desarrollo muy significativo y cada vez van a estar más presentes en el proyecto de experiencia de empleado de las compañías.
Conclusiones IV Informe: Inteligencia Artificial
1. La principal causa de la disrupción que representa la IA en el marco legal de la organización del trabajo, en general, y de las relaciones laborales, en particular, es su potencialidad para adoptar decisiones autónomas y predictivas, al margen o en colaboración con las personas.
2. La IA debe plantearse de forma clara e indubitada en la organización, como una necesidad empresarial para mejorar la productividad y, en consecuencia, la competitividad presente y futura de la compañía.
3. Ninguna de las nuevas formas de organización ni de ejecución del trabajo que derivan de la implantación extensiva de la IA en una empresa, puede llevarse a la práctica si no es a través de un profundo cambio cultural.
4. La relación entre IA y ética es un debate que está en pleno desarrollo a nivel político, social, filosófico y empresarial, y ello por la necesidad de alinear los sistemas de IA adoptados por las empresas a los códigos de buenas prácticas empresariales de cada una de las organizaciones y , más en general, a los valores y principios que sustentan a los Ordenamientos jurídicos modernos.
5. Agilidad organizativa e IA conforman el “binomio productivo”. La integración de herramientas de IA está causando a las organizaciones la necesidad de convertirse en mucho más colaborativas y orientadas al trabajo en equipo en contraposición con las estructuras más tradicionales y más jerarquizadas.
6. La analítica de personas combinada con el potencial de la IA está ya empezando a jugar un papel transformador en las estrategias de gestión de los recursos humanos.
7. Las herramientas y aplicaciones de IA cada vez van a estar más presentes en el proyecto de experiencia de empleado de las compañías, dado que su accesibilidad es instantánea desde cualquier dispositivo móvil y el conocimiento para su manejo o ya se tiene o se adquiere con gran facilidad.
8. En relación al mercado de trabajo, las eventuales consecuencias derivadas de la introducción masiva de la IA en las empresas plantea la cuestión de si, frente al avance de la IA, la normativa sobre la regulación del empleo debería proteger a los trabajadores y promocionar la contratación de personas.
9. En el ámbito de la selección y promoción de trabajadores, ya se anticipan posibilidades de uso de sistemas de IA al poder automatizar algunos puntos cruciales del proceso de selección y evaluación promocional para ahorrar tiempo y recursos.
10. Las obligaciones que pueda introducir la normativa sobre el mercado de trabajo y la relación laboral a raíz del desarrollo de la IA deban centrarse muy especialmente en la vertiente formativa antes, durante y después de terminada una relación laboral, de manera que permita a los trabajadores adquirir las nuevas habilidades necesarias en el lugar de trabajo y, al mismo tiempo, neutralizar los efectos negativos que en algunos casos pueda tener esta tecnología, promoviendo la recolocación de los trabajadores afectados en tareas distintas.
Foto (de izquierda a derecha): Guillermo Tena, Director del Instituto Cuatrecasas; Marta Martínez, Presidenta de IBM España, Portugal, Grecia e Israel; Salvador del Rey, Presidente del Instituto Cuatrecasas; Marta Machicot, Director Global de Recursos Humanos de Telefónica y Santiago Soler, Secretario General de ADECCO.