Diseñar un plan estratégico siempre es un “dolor de cabeza”. Y no es para menos, ya que ha de contener los ingredientes que deben conducirla al éxito… o al fracaso, en función de cómo se ejecute y de cómo sea capaz de adaptarse a los imprevistos que se encuentre en el camino.
Una estrategia es específica para una empresa, en un entorno específico, apuntando a un objetivo específico en un momento específico en el tiempo.
Claridad podría ser el término que mejor haya de definir un ejercicio de plan estratégico y Gartner acaba de publicar un modelo que puede servir de guía para enfocarlo. Sus expertos, además, llaman la atención sobre las excepcionales circunstancias actuales y el foco que imponen tanto en esa claridad como en la medición y en la comunicación.
Los key concepts clave de un plan estratégico:
- Identificar algunas métricas que definen el estado final actual y objetivo de la función
- Documentar y monitorear supuestos clave.
- Las iniciativas clave necesarias para alcanzar el estado final.
- Una declaración concisa que destile y comunique la estrategia.