El oxímoron de la innovación

Maite Sáenz5 junio 20146min

“La innovación, o es social o no es innovación”. Alto y claro lo ha afirmado el Presidente de Honor del Instituto Vasco de competitividad, José Luis Larrea, durante el workshop «La innovación, requisito para la competitividad» convocado por la UOC en Madrid. El que ha sido presidente de Ibermática durante los últimos cinco años y otrora consejero del Gobierno del País Vasco, ha compartido sus reflexiones sobre el contexto económico y empresarial en el que surge la actual necesidad de innovación y sobre cimientos que deben sostener cualquier proceso de innovación.

Para empezar, ha advertido sobre la falta de un lenguaje común en materia de innovación y los efectos que ello tiene en cuanto a cómo hay que entenderla y concretarla. En su opinión, “la innovación no es tanto un suceso como un proceso y por eso el reto de la innovación es introducir novedades de manera sostenible en el tiempo y aportando a la sociedad un valor reconocido por el mercado”. Todo un cambio de paradigma que implica, a su vez, un profundo cambio en la cultura de las organizaciones que favorezca el paso de la innovación como suceso sobrevenido y operativo al proceso anticipado y estratégico.

Todo ello lo explica Larrea hablando del oxímoron de la innovación, una figura retórica con la que intentar clarificar la esencia de la innovación, que no es otra que la contradicción entre la innovación (tradicionalmente puntual) y la sostenibilidad del proceso de innovación.

¿QUÉ ES, PUES, LA INNOVACIÓN?

Larrea la define a partir de 9 principios inspiradores:

1. – Es un concepto abierto. Sólo los proyectos abiertos evolucionan y progresan aunque la realidad es que “todos tendemos a vivir en nuestra charca”.
2. – Se inspira en la naturaleza y el entorno, en lo que es conocido como la Biomimética. Hemos de inspirarnos en lo que nos rodea, en lo que vivimos en nuestras oficinas, centros productivos, etc.
3. – Reconoce y pone en valor la diversidad, siendo consciente de ésta necesita de la cooperación.
4.- Se produce en todos los ámbitos, no sólo en los productos, siendo l La innovación en gestión del conocimiento la más difícil de copiar.
5.- Supone transformación e implica ruptura. ¿Ha de doler? Si duele es que se están cambiando las cosas.
6.- Se apoya en la calidad para construir la excelencia. Ningún sistema de innovación es sostenible sin estar basado en la calidad. No obstante, y aunque con ella comparte algunos valores otros le son contrarios. Por ejemplo, la aplicación de la calidad exige jerarquía y la innovación no…
7.- Busca resultados y necesita medirse. Lo que no se mide no se gestiona. Medir es comparar.
8.- Se produce a cualquier escala, bien sea en una empresa grande o en una pequeña.
9.- Necesita compartir valores para generar cultura. Ningún sistema es sostenible si no consigue esta comunión de valores.
10.- Coloca a la persona en el centro de la innovación. Ella es el agente de innovación fundamental, el emprendedor. Una organización que quiere ser innovadora ha de estar llena de emprendedores a los que hemos de tratar como tales y ello implica también saber gestionar el error como canalizador fundamental del aprendizaje.

¿QUÉ LEYES LA PRESIDEN?

1. El círculo de Leonardo. Sólo se producirá innovación sostenible que aporte un valor reconocido si equilibramos la creatividad y la modelización sobre la base de los valores. Primero llega la creatividad, luego viene la modelización y finalmente el establecimiento de los valores.

2. El combate. La innovación sostenible y competitiva exige gestionar las contradicciones inherentes a todo proceso evolutivo. La innovación remueve cimientos.

3. Las preguntas. Una persona y una organización que aspira a ser innovadora ha de aprender a convivir con más preguntas que respuestas y a disfrutar con ello. “Cambiar de respuesta es evolución, cambiar de pregunta es revolución”, (Jorge Wagensberg).

4. Los opuestos. El desafío de la innovación está en el universo de los valores marginales. “La creatividad reside en el extrarradio”, Bigas Luna.

5. El tiempo. La innovación vive en el tiempo y exige una adecuada gestión del mismo para que se produzca y sea sostenible. “Nosotros a veces matamos el tiempo pero él nos entierra”, Joaquím María Machado.

Y FINALMENTE, ¿EN QUÉ ESPACIOS HA DE MOVERSE

1. Estímulo
2. Conversación
3. Reflexión
4. Acción
5. Reconocimiento
6. Divulgación.


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