Cargas de trabajo: de las frases hechas al burnout creciente

Redacción ORH22 agosto 20227min
A pesar de que el mercado laboral español está en plena contracción, el sueño de muchos españoles es cambiar de trabajo. Según datos de HAYS, concretamente el 77% de los trabajadores españoles lo haría si pudiera y un 52% se ha puesto ya manos a la obra y está en búsqueda activa de un nuevo destino laboral. El 35% declara que el motivo se debe al sueldo y los beneficios sociales, el 23% indica que es por una falta de oportunidades de futuro y el 12% afirma que es a causa del rol que tienen actualmente. También buscan mayor flexibilidad, conciliación, desarrollo de carrera, buen ambiente y una carga de trabajo equilibrada. Precisamente sobre este último aspecto la plataforma de trabajo colaborativo Trello ha elaborado un decálogo para mantener el equilibrio entre la percepción del empleado respecto de lo que da a cambio de lo que él aporta en el desempeño de sus crecientes obligaciones.

 

1.  Preguntar para saber.

“La mejor manera de tener la lectura precisa de las cargas de trabajo es manteniendo conversaciones honestas y sinceras con los miembros del equipo”. No es cuestión de estar todo el día preguntando sobre si la carga de trabajo es excesiva; Trello recomienda un breve control semanal para conocer cómo se percibe esa presión, cómo se traduce ello en la productividad y si hay un margen de maniobra real para asumir más tareas. Algunas de las preguntas que el manager puede manejar en esas conversaciones podrían ser:

  • ¿Cómo te sientes acerca de tu carga de trabajo esta semana? ¿O en general?
  • ¿Hay alguna tarea que pueda ayudarte a delegar y priorizar?
  • ¿Te encuentras con algún desafío que está ralentizando tu progreso?
“Tenga en cuenta -advierten desde la plataforma -que es posible que no siempre sean directos en sus respuestas y que hay que saber leer entre líneas comentarios sutiles”, que pueden ser simples frases hechas o esconder un burnout creciente
    • “¡Esta semana está siendo demasiado!”
    • «¿Ya es viernes?”
    • “Mi lista de tareas no para de crecer”
    • “No sé por dónde empezar”

2. Leer entre líneas.

Si bien la comunicación es fundamental, no es la única herramienta ni la que lo soluciona todo. Especialmente porque “las personas no siempre se sienten cómodas siendo vulnerables y honestas con sus gerentes”. La tecnología ayuda en esta tarea dando visibilidad a en qué está trabajando cada quién con información gráfica de las tareas asignadas a los equipos en general y a sus integrantes en particular, y con líneas de tiempo que permiten ver, de un vistazo, las fechas de inicio y vencimiento de cada una de ellas.

3. Escuchar para actuar.

“Si quiere de verdad ayudar a su equipo, entonces comprométase no sólo a recopilar comentarios, sino también a actuar en consecuencia”; de lo contrario, la frustración estará servida, y con razón. Cuando se identifique un problema de carga de trabajo hay que tomar medidas, grandes o pequeñas. Por ejemplo:

Problema 1: Las reuniones monopolizando el tiempo de trabajo

Posibles soluciones

  • Establecer días fijos a la semana para mantenerlas;
  • Elaborar una agenda de cada reunión y distribuirla previamente.
  • Analizar las reuniones ya agendadas y preguntarse: “¿De verdad es necesaria?”.
Problema 2: Las peticiones urgentes y de última hora de otros departamentos generan cuellos de botella.
Posibles soluciones:
  • Crear un proceso de solicitud de trabajo más formal para que otros departamentos entiendan sus requisitos y el cronograma típico.
  • Prever márgenes de tiempo en el cronograma del equipo para acomodar los imprevistos.

4. Aprender a decir “no”.

El tiempo tiene su límite y las capacidades de las personas para estirar el suyo también. Cuando se agoten las posibilidades de priorizar tareas, adaptar los tiempos y asumir proyectos, será hora de admitir que la carga de trabajo se convierte en inasumible. Entonces…

  • … sea valiente y diga no a las urgencias de otros departamentos;
  • … priorice tareas y no presione con todas a la vez;
  • … identifique qué tareas tienen impacto y elimine las que no.

“Una matriz de prioridades (a menudo llamada Matriz de Eisenhower) puede ser útil para determinar en qué se debe enfocar el equipo y qué puede dejar en segundo plano”, recomiendan desde Trello. Los cuatro cuadrantes ayudarán a categorizar las tareas como:

  • Urgente e importante.
  • Urgente y no importante.
  • No urgente e importante.
  • No urgente y no importante.
5. Liderar con el ejemplo.

Seamos honestos con nosotros mismos: “las cargas de trabajo irracionales son, a menudo, un problema más cultural que logístico” y la prueba del algodón está en cómo distribuyen su tiempo los propios gerentes. ¿Cómo es su carga de trabajo? ¿Están agobiados y lo transmiten al equipo? ¿Cómo vive el equipo la gestión de su mánager? No será una reflexión que propicie un cambio radical pero sí que le ayudará a ser más realista con las cargas de trabajo, las suyas y las de los demás.


Observatorio de Recursos Humanos

ORH | Observatorio de Recursos Humanos

Desde 2006 trabajamos para ofrecer contenidos e información de valor para el profesional de la gestión de RRHH, con el convencimiento de que el conocimiento, en sus vertientes de creatividad, innovación y aprendizaje continuo, es el principal valor de una dirección eficaz.



Contacta con nosotros


Nuestros Otros Proyectos


Suscríbete al boletín

* campos obligatorios
Acepto las condiciones de uso y la política de privacidad


Síguenos en Redes Sociales