Renovarse o morir, adaptarse a la situación o quedarse fuera del mundo laboral. La actual situación de crisis y constante cambio requiere, más que nunca, conseguir una conciliación y armonía con el entorno que nos rodea. Conforme a ello, la movilidad en el trabajo se presenta como un aspecto de obligada adaptación al que todos estamos expuestos en nuestros trabajos si la necesidad lo requiere, es decir, que el trabajador cambie de lugar de trabajo para continuar con su puesto o para acceder a un empleo.
Así lo muestra el informe de Randstad que analiza la movilidad interprovincial entre el periodo 2013-2014. Según este estudio, en España, se han firmado 2.112.989 millones de contratos que implicaron un desplazamiento del trabajador a otra provincia, lo que representa una tasa de movilidad superior al 12,6%.
El informe, que analiza los datos de migración interprovincial y la contratación del SEPE, muestra que este pasado año se ha alcanzado la cifra más alta desde 2007 en el que se firmaron 2.276.249 de contratos.
TASA DE MOVILIDAD POR PROVINCIAS
Castilla-La Mancha (28%), La Rioja (25,4%) y Castilla y León (15,7%) son las regiones que muestran la tasa de movilidad más elevada. En el caso de las dos primeras provincias, uno de cada cuatro contratos firmados implica movilidad interprovincial. Por contraposición, las Islas Canarias tienen la tasa de movilidad más baja (5,4%) por su ubicación geográfica, seguida de Asturias (7,5%) y Extremadura (9,1%); todas ellas por debajo del 10%.
Las comunidades autónomas que más han aumentado sus tasas de ocupación son Baleares, Galicia, Murcia y Andalucía.
LOS SALDOS POSITIVOS Y NEGATIVOS MÁS PRONUNCIADOS
El estudio de Randstad muestra que existen más provincias emisoras que receptoras. Hay 16 provincias con saldos positivos (donde entran a trabajar más profesionales de los que salen). En este sentido, Madrid, Barcelona y Baleares son las regiones que registran saldos positivos de 167.000, 49.000 y 30.000 trabajadores, respectivamente.
Toledo y Cádiz presentan resultados negativos superiores a los 30.000 profesionales. En el caso de Córdoba, Badajoz, Pontevedra y Tarragona son más de 18.000 trabajadores.
SECTORES DE MAYOR MOVILIDAD
El informe también analiza en qué sector se produce mayor o menor movilidad. Se aprecia que la movilidad de los trabajadores ha descendido su importancia en el sector servicios y en construcción, y por el contrario, aumenta en agricultura e industria.
Del total de contratos, más de 2,1 millones los han firmado profesionales del sector de la agricultura y la pesca. Algo similar ocurre en la industria puesto que el número de contratos ha aumentado en 149.000 con respecto al año anterior con una cifra situada en los 84.5000 contratos.
