7 de cada 10 millennials en desempleo prefiere trabajar a cobrar una prestación por desempleo durante los próximos 6 meses aunque ésta fuese por el mismo importe que su salario. Por su parte, el 14,1% aceptaría el trabajo a cambio de un incremento salarial y/o mayor duración del contrato, el 6,1% lo haría sólo a cambio de un incremento salarial, el 5,9% pondría como condición una mayor duración del contrato y el 3,8% decidiría no aceptarlo y quedarse con la prestación.
Consultados acerca de las ayudas o prestaciones que perciben en la actualidad, el 79,5% afirma no recibir ningún subsidio o ayuda por desempleo frente al 20,5% restante que sí cuenta con ese aporte. Ante estas circunstancias, el 59,3% decide apoyarse en su red familiar para contar con la ayuda económica que éstos le prestan, el 24,3% está utilizando sus propios ahorros, el 9,1% realiza trabajos sin declarar, el 2,7% recibe otro tipo de prestaciones o pensiones, el 2% declara tener otras fuentes de ingresos, el 1,5% acude a la beneficencia para salir adelante y el 1% cuenta con rentas patrimoniales.
A pesar de que en su mayoría cuentan con una formación superior (65%) que, en principio, debería facilitarles el acceso a un trabajo (registran la tasa de paro más baja según los últimos datos de la EPA), este colectivo está siendo duramente castigado. El 49,7% de ellos asegura que lleva más de 6 meses o más en situación de desempleo: el 19,2% lleva en paro entre 6 meses y 1 año; el 18,2%, más de 2 años; y el 12,3%, entre 1 y 2 años. El 50,3% restante no alcanza esos 6 meses, situándose el 31% en 3 meses y el 19,3% entre 3 y 6 meses.
Las oportunidades de trabajar no han abundado durante el período que han estado en situación de desempleo, hasta el punto de que el 63,2% de los encuestados no ha recibido ninguna oferta de empleo por parte de las empresas. Si bien, a pesar de encontrarse en paro, el 69,78% estaría dispuesto a rechazar una vacante por algunos de los siguientes motivos: salario insuficiente (45,3%), tipo de contrato (40,2%), duración de la jornada laboral (30,8%) cambio de residencia (18,1%), y categoría profesional inferior a la esperada (17,3%).
Acceder a un puesto de trabajo ilegal, es decir, en el que no se le dé de alta en la Seguridad Social, a veces es una de las opciones que se pueden plantear como alternativa para poder seguir trabajando y percibiendo un salario, aunque sea “en negro”; de hecho, el 36,5% ha recibido alguna oferta de este tipo, mientras que, por el contrario, un 63,5% no ha tenido conocimiento de estos trabajos. Pero, de aquellos que tuvieron acceso a estas propuestas, ¿Cuántos aceptaron finalmente? el 56% indica que no lo aceptó; el 44% restante, en cambio, sí lo hizo.
Pero, ¿por qué razones se encuentran en paro? El 32% asegura que se debe a que su relación laboral ha terminado. Por otro lado, el 13% se encuentra buscando su primer empleo, el 9% ha cambiado su residencia, otro 9% indica que se debe a un despido, el 8,5% es estudiante y no se encuentra trabajando en este momento, el 7,5% decidió poner fin a su contrato con una baja voluntaria, el 6,1% se dedicó a un trabajo de temporada que finalizó y el 4,8% se vio afectado por un cierre de la empresa en la que trabajaba.
La falta de experiencia es el principal escollo para encontrar trabajo
Muchas veces no poder adquirir más experiencia supone un problema dado que las empresas suelen dotar de mucha importancia a este requisito a la hora de reclutar. Los millennials encuestados esgrimen que no contar con el suficiente bagaje profesional está siendo su principal problema a la hora de acceder al mercado laboral (45,8%). Otra cuestión es la existencia de mucha competencia para un puesto de trabajo (42,4%), también la falta de contactos (28,7%). Otros lo achacan a la mala suerte (18,9%), a que sus estudios no tienen demanda en el mercado laboral actual (17,5%), a su edad (13,9%) o a la falta de estudios (11,9%).
La nota predominante es el optimismo de estos candidatos. 3 de cada 4 encuestados ve probable o muy probable encontrar trabajo en los próximos meses. Por el contrario, el 25% restante lo considera muy poco probable.
Parece que en líneas generales los participantes de esta encuesta tienen claro que la formación es una pieza clave en su futuro. El 86,88% piensa que ampliar su formación puede aumentar las posibilidades de encontrar trabajo frente al 13,12% restante que no valora esta opción positivamente. Es más, aquellos que afirman que no están buscando trabajo activamente en este momento (7%) lo hacen porque deciden dedicar sus esfuerzos a terminar sus estudios antes de empezar a buscar trabajo (23,7%).
Los desempleados de esta generación están aprovechando para adquirir nuevos conocimientos con formación gratuita (39,3%) y pagada (26,5%). Sin embargo, un 34,2% no está realizando ningún tipo de formación.
Un comentario
Adri
12 febrero 2019 at 18:09
¡Muy buen artículo! Es verdad que hoy en día es muy importante tener una presencia activa y positiva en las redes sociales.
Te dejo un artículo interesante sobre el tema
cvtrends.com/las-redes-sociales-son-la-nueva-carta-de-presentacion
¡Enhorabuena por el artículo!
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