El conocido como Principio de Peter señala una tendencia al ascenso jerárquico en las empresas hasta un punto de bloqueo y anclaje de los empleados, que son promocionados hasta un cargo que no son capaces de desempeñar de forma óptima.
Según señala Kaizen Institute esto se debe a varios factores. Por una parte, se carece de un proceso claro de análisis de competencias en el ámbito de cargos directivos y por otra, estos cargos medios o altos apenas emplean entre un 6% y un 8% de su tiempo en tareas de liderazgo y gestión de equipos, desperdiciando más de un 90% de su jornada laboral en actividades burocráticas que no apoyan su capacidad y evolución como líderes.
La consultora recomienda que ese 90% desperdiciado se emplee en tareas como coaching directo a las personas o equipos para corregir, aconsejar y acompañar a los empleados, y así valorar que competencia tienen que desarrollar o mejorar. Por otro lado, tienen que invertir tiempo en técnicas de resolución e identificación de problemas.
Finalmente, según este mismo análisis, un equipo motivado, con objetivos claros, medición de logros y que trabaja bien en equipo, puede lograr una productividad entre un 5% y un 15% superior. Si bien este incremento de la capacidad de trabajo no es exclusivamente atribuible al líder de equipo, éste juega un importante papel para apoyar estos logros.
“Éste no es un problema exclusivo de España sino un mal endémico que afecta a la mayor parte de países del mundo de forma global y aunque es complicado lograr cambios, está comprobado que con acciones concretas se puede conseguir una promoción óptima de los líderes, mejorando sus capacidades, tiempo dedicado al liderazgo e impulsando en paralelo la productividad de los equipos”, señala Borja Iglesias, Director de Operaciones de Kaizen Institute.