La comunicación es una pieza clave en la estrategia de implantación de un plan de retribución flexible porque sólo teniendo información clara y precisa de cómo puede ver los beneficios en la nómina tomarán una decisión positiva al respecto. La DRH de Edenred en España, Patricia Melfo, explica desde su experiencia los pasos a dar para configurar ese plan de comunicación:
Segmentar a los destinatarios para identificar necesidades: La edad de la plantilla, su situación personal y/o familiar y otros criterios de segmentación son muy últiles a la hora de saber también qué necesidades tiene nuestro colectivo y de adaptar las opciones según grupos de interés.
Hacer compatibles los mensajes con la cultura de la organización: Como Edenred es una organización muy informal nos funciona la comunicación muy divertida y visual”. Las culturas más informales precisan de un tipo de comunicación más visual y espontánea que las que se remiten a modelos más clásicos, en los que los canales de comunicación suelen seguir unos patrones más formales.
Insistir: La comunicación debe responder a un esquema periódico que ayude a convertir el programa de retribución flexible en una «charla de cafetería» con la que la experiencia de unos sirva de ejemplo para la adhesión de otros.
Brevedad y concisión: “La magia de la comunicación interna es que los e-mails sean cortos, que no haya que bajar con la ruedita, para que a la gente no le tome un tiempo enorme entender”, apunta Patricia.
Facilitar los cálculos y resolver dudas. Hablar de retribución flexible es hablar de números sensibles: ni más ni menos que de cálculos sobre la nómina. Tener los supuestos más comunes a mano y a disposición de los empleados es una recomendación más que útil, necesaria. Y proveerles también de un calculadora online es una herramienta sencilla de utilizar y que resuelve dudas al instante.
¿Te surgen más dudas a la hora de comunicar el programa de retribución flexible? ¡Compártelas!