En particular, el fondo protegerá a los empleados de Edenred, en particular a los más vulnerables, en países con poca o ninguna cobertura sanitaria o red de seguridad social. Y apoyará a los propietarios de restaurantes asociados, que se han visto gravemente afectados por las estrictas medidas de confinamiento en los distintos países en los que opera el Grupo.
Edenred tiene un perfil de deuda equilibrado, con una relación entre deuda neta y EBITDA de 1,9 a finales de 2019 y sin obligaciones de reembolso importantes hasta 2024. El Grupo también tiene una línea de crédito sindicado no utilizada por valor de 750 millones de euros con vencimiento en 2025.
Por lo tanto, el Grupo podría pagar el dividendo anunciado el 26 de febrero de 2020 en su totalidad, manteniendo al mismo tiempo suficiente efectivo para superar la situación actual y continuar aplicando el plan estratégico de Next Frontier de 2019 a 2022.
Sin embargo, en una reunión extraordinaria celebrada el 6 de abril de 2020, el Consejo de Administración de Edenred decidió reducir el dividendo propuesto para 2019 a 0,70 euros por acción, lo que representa una reducción del 20 % con respecto al importe inicialmente anunciado. Esta decisión se someterá a la aprobación de los accionistas en la Junta General Mixta del 7 de mayo de 2020, que se celebrará a puerta cerrada. Las opciones de pago de dividendos no se modifican.
Bertrand Dumazy, Presidente y Director General del Grupo, renunciará al 25 % de su remuneración en 2020, según las condiciones establecidas por la asociación empresarial francesa AFEP en sus recomendaciones del 29 de marzo de 2020. Una cantidad correspondiente será donada al fondo «Más que nunca». Asimismo, los miembros del Comité Ejecutivo y del Consejo de Administración del Grupo han decidido voluntariamente donar una parte de su remuneración al fondo.