La Fundación Adecco refuerza en Guipúzcoa el proyecto #EmergenciaPorElEmpleo con el objetivo de lograr la integración sociolaboral de personas paradas mayores de 45 años.
La crisis provocada por la COVID-19 ha golpeado en mayor medida a las personas en riesgo de exclusión, como los mayores de 45 años en situación de paro de larga duración, que ya pasaban por dificultades antes de la pandemia. En el segundo trimestre de 2021, la población de entre 45 y 54 años representaba el 23,7% del total de parados del País Vasco, lo que supone un aumento de casi cuatro puntos respecto a 2020, cuando se situaba en el 19,9%.
Ante esta situación, este programa pone en marcha un itinerario de empleo dirigido a 40 personas desempleadas mayores de 45 años empadronadas en el territorio guipuzcoano. Ya que el paro es más acusado entre las mujeres de esta provincia (el 10,35% en el segundo trimestre de 2021, duplicando la tasa masculina), el objetivo es que el 65% de las plazas del programa sea para ellas.
El programa tendrá una duración de siete meses y las inscripciones están abiertas para los candidatos hasta el próximo 17 de septiembre. El objetivo final es que los participantes desarrollen habilidades y competencias personales, técnicas y laborales para aumentar sus opciones de empleabilidad. En concreto, recibirán formación en las áreas de auxiliar de almacén, manejo de carretilla, limpieza hospitalaria y de residencias.
La formación estará a cargo de la entidad Fondo Formación Euskadi, y se llevarán a cabo en las poblaciones de Irún, Hondarribia, Lasarte-Oria y Andoain.
Talento sénior: mucho que ofrecer
Según Montse Izaguirre, directora regional de la Fundación Adecco en País Vasco, “éste es el camino para poner en valor el talento sénior. Los mayores de 45 años siguen siendo un factor crítico para la competitividad de las empresas y de la sociedad en general. No debemos olvidar que esta franja de edad está demostrando su dinamismo en una época de crisis sin precedentes. Ayudarlos a reinventarse y a explorar nuevas oportunidades son las mejores herramientas para que se reincorporen a un mercado laboral en el que aún tienen mucho que ofrecer”.
Por su parte, Amaia García Fernández, coordinadora de la Fundación Fondo Formación, resalta que “resulta de gran importancia sensibilizar y concienciar a las empresas de cómo las personas trabajadoras mayores de 45 años pueden convertirse en un gran activo, ya que, por regla general, gozan de mayores competencias en cuanto al pensamiento estratégico, la sabiduría, la capacidad de deliberar, la facultad de racionalizar, etc. Además, suelen poseer una buena red de contactos y valoran mucho una oportunidad laboral ofreciendo lo mejor de sí mismas”.