El Horizonte 2030 está cada vez más próximo y ya ha marcado los retos a lograr para cada empresa a lo largo de los próximos diez años, prácticamente todos enmarcados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. En este camino, el llamado benchmarking, muy presente en el Modelo EFQM, se ha convertido en un gran aliado corporativo. Una herramienta que consiste en buscar ejemplos a seguir y con los que compararse con el fin de mejorar en el campo de las buenas prácticas y en su aplicación.
En este sentido, el Club Excelencia en Gestión, asociación empresarial dedicada a mejorar la gestión y los resultados corporativos, ha elaborado la Guía Inicial de Benchmarking, un documento interactivo, accesible vía web, que ha sido elaborado con la colaboración de sus socios. El Club lleva varios años impulsando diversas acciones enfocadas a compartir experiencias y conocimiento en este ámbito. Ejemplos de ello son las diversas actividades de co-creación organizadas en torno a un reto concreto de gestión o los grupos de trabajo sectoriales específicos de sanidad, administraciones públicas o educación.
También sus Encuentros en la Cumbre, en los que participan los principales líderes de organizaciones socias del Club. Y sus Premios anuales de Buenas Prácticas en Gestión, una vía de reconocimiento para todas aquellas organizaciones que incorporan a su estrategia nuevas fórmulas que apoyan la gestión excelente, innovadora y sostenible.
Entre los galardonados, finalistas y proyectos con menciones especiales, hay muchos ejemplos de buenas prácticas basadas en el benchmarking: aplicaciones móviles para promover los hábitos saludables entre la población general; servicios de apoyo para la tercera edad; programas de alerta en el entorno de la escuela para saber reaccionar ante un choque anafiláctico; estrategias para la gestión de alianzas entre organizaciones; protocolos de reciclaje a nivel interno; y planes de movilidad sostenible son algunos de los más destacados. Todos ellos disponibles en la plataforma de gestión del conocimiento ÁGORA CEG.
«Organizamos actividades con un enfoque estructurado que han de servir a las organizaciones para salir fuera de su propio entorno y ver cómo otros realizan tareas similares a las suyas pero con mejores resultados. Es una oportunidad de aprendizaje y mejora que sólo se completa cuando las lecciones aprendidas se han incorporado de forma sistemática a la propia forma de trabajo de las organizaciones que participen en ellas», explica Ignacio Babé, Secretario General y CEO el Club Excelencia en Gestión.
10 razones para hacer benchmarking
La guía incluye, entre otros contenidos, declaraciones de varios líderes de grandes empresas que operan en España, socias del club, con experiencias diversas en la materia. Y también un decálogo con las principales razones que deben empujar a una empresa a poner en práctica el benchmarking, que se resumen en tres puntos:
1. Encamina a cualquier organización hacia la mejora de sus resultados, de su reputación y de la confianza que transmite a clientes, empleados, proveedores y demás grupos de interés.
2. Permite aprender de forma activa y poner en práctica las estrategias del mejor referente en un campo concreto, sirve para entender mejor las nuevas tendencias, potenciar la legitimidad y fomentar la creatividad y la innovación.
3. Refuerza el statu quo de la organización que lo lleva a cabo, la mantiene en movimiento ayudándola a vencer la resistencia al cambio y a adaptarse con mayor agilidad, y la convierte en un nuevo centro de benchmarking que servirá como apoyo a otras organizaciones que quieran aprender de su experiencia.
Según Ignacio Babé, «puede ayudar a saber dónde está nuestra organización respecto al resto, permite entender el mercado y tomar decisiones para mejorar el rendimiento. Por otra parte, nos ayuda a conducir mejoras continuas en procesos, productos, servicios y soluciones que mejoren la satisfacción de todos los grupos de interés y generen una ventaja competitiva en el mercado».
