Marisa Navarro, doctora en medicina, psicoterapeuta y autora de “La medicina emocional”, afirma en su libro que trabajar desmotivado perjudica seriamente la salud. Enfermedades del sistema digestivo, dermatológicas y del sistema muscular, son las más comunes en casos de desmotivación laboral. Estas dolencias avisan de la necesidad de un cambio, pero “no siempre es de empleo, sino de nuestros pensamientos y actitudes ante él”.
Los pensamientos que tenemos sobre el trabajo que realizamos son fundamentales, aprender a manejarlos es una técnica a nuestro alcance. La doctora asegura que “cambiando el pensamiento, cambiará nuestra vida. Es de sabios decirnos lo que necesitamos para encontrarnos bien, lo cual no significa autoengañarnos, pues si se ha decidido realizar un trabajo, aunque el motivo haya sido por no encontrar otro, y necesitar un sueldo, aunque no me guste lo que hago, hay que jugar a mi favor y hay que estar en armonía con la decisión que he tomado”.
Según Marisa Navarro para ser felices, profesionalmente hablando, no es necesario fijarnos en la labor que realizamos sino más bien en los pensamientos que inevitablemente influyen en la actitud de cada empleado. O lo que es lo mismo, de la actitud que mostremos en el trabajo dependerán nuestras acciones y con ello el estado de ánimo para enfrentarnos al día a día. Navarro asegura que “todos podemos ser buenos desempeñando cualquier empleo, las claves son intención, dirección, ilusión y poner el corazón en lo que hacemos”.
“Un estado emocional negativo producido por el ámbito laboral, teniendo en cuenta la cantidad de horas y días que pasamos en el trabajo, puede ser un potenciador de enfermedades, psicosomáticas o de otra índole”, explica la doctora.
“También son comunes, en las personas que en su trabajo están totalmente desmotivadas y tristes, las dolencias relacionadas con el sistema muscular, migrañas y cefaleas tensionales, así como problemas dermatológicos”, asegura Marisa Navarro.
Para muchas personas un empleo con el que no se sienten felices, se convierte en motor de generación de emociones negativas y estas mantenidas en el tiempo, disminuirán su sistema inmune.
CINCO CONSEJOS PARA TENER SALUD EN EL TRABAJO
Desde su experiencia, Marisa Navarro aporta cinco consejos para encontrar la motivación cuando la labor que realizamos no nos gusta.
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TRATAR DE ESFORZARSE
El esfuerzo siempre trae buenos resultados. Los buenos resultados nos animarán a sentirnos bien y, de este modo, haremos lo posible por seguir en ese camino que nos brnida el reconocimiento del resto de compañeros. Y es que el reconocimiento es motivador. Cuando se pone interés en las cosas y se intenta desarrollar lo mejor posible un trabajo, nos percatamos de que somos capaces de todo, de manejar situaciones difíciles y salir fortalecido de éstas con mayor autoestima y consideración personal.
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FIJARNOS EN LA COMPENSACIÓN Y EL BENEFICIO
Aferrarnos a las compensaciones y beneficios que nos da el empleo que realizamos. Siempre hay que pensar que el trabajo es una elección propia que se obtiene por una compensación, económica o de cualquier tipo como horarios, cercanía, flexibilidad, aprendizaje…
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GENERAR UN ENTORNO DE TRABAJO AGRADABLE
Potenciar las buenas relaciones entre compañeros, fomentar el consenso y la alegría con el resto de compañeros hará que nos sintamos más felices en el trabajo. La mitad del día la pasamos en el puesto de trabajo así que es importante que el ambiente que nos rodea sea agradable.
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NO CENTRAR LA VIDA EN EL TRABAJO
Hay que enriquecer los espacios de ámbito personal, no solo centrarnos en el trabajo. Buscar otras actividades que nos hagan sentir realizados.
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HACER LO QUE TENGO QUE HACER
El trabajo es un compromiso, y como tal tenemos que hacer lo que tenemos que hacer saltando las apetencias personales de cada momento. Esto es complicado y requiere esfuerzo y disciplina pero a largo plazo tendrá su recompensa. Si suprimimos el “no me apetece” por el “tengo que hacerlo”, nos sentiremos mejor.
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ALEJARSE DE LAS PERSONAS TÓXICAS
Si anteriormente comentábamos la necesidad de rodearnos de un ambiente agradable, las personas tóxicas envenenan todo lo que tienen a su alcance. Si estás cerca de una persona tóxica lo más probable es que te contagie su estado de ánimo.
