■ Lejos quedan las condiciones astronómicas que disfrutaban los expatriados para aceptar una posición fuera de su país.
Participar en la definición de la estrategia, asumir con eficacia las tareas de soporte y administración y trabajar en el employee engagement son las tres tareas en las que necesariamente ha de participar el Departamento de Recursos Humanos en el ámbito de un proyecto de expansión internacional. Así lo espera de sus profesionales Luis Álvarez, Presidente para Emea & Latam de British Telecom Global Services, y así lo explicó durante su participación en la reciente jornada “Internacionalización, claves para la consolidación” celebrada por iniciativa de IHR Consultancy y en la que junto a él han participado Jesús Benegas, Presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales de la CEOE, Óscar Vía, Director General de Desarrollo Internacional de Isolux Corsan, y Luis Zamora, Director de Recursos Humanos Internacional de Indra. Moderados por Carlos Espinosa, Managing Partner en el Center for Innovative Execution CFIE, todos ellos han comentado el momento actual que vive España en su estrategia de comercio internacional y han analizado las prácticas de sus respectivas compañías. Y especialmente dos asuntos coparon el interés suyo y de los cerca de 80 asistentes a la jornada: las condiciones de la asignación internacional y la comunicación en entornos globales.
En cuanto al primero de ellos, y desde la perspectiva de Óscar Vía, de Isolux Corsan, “el modelo de expatriados ha cambiado mucho y ha pasado de ser un premio a una necesidad que el implicado ha de asumir como una fase más de su desarrollo porfesional”. Y desde BT se va incluso más allá: “Nosotros hemos eliminado el concepto. Publicamos las vacantes en los distintos países y hay una demanda de los que quieren irse pero con las condiciones de esos países, con una ayuda inicial de desplazamiento pero poco más”. Lejos quedan, pues, las condiciones astronómicas que disfrutaban los expatriados para aceptar una posición fuera de su país. Ahora, como explicó el Luis Zamora, de Indra, “las asignaciones internacionales tienen parte de plan de carrera en un empresa global”.
Y respecto a la comunicación, el máximo ejecutivo de BT advirtió que “comunicar bien en estos entornos es de las cosas más complicadas de conseguir. Hay que cuidar lo que se dice desde la central y cómo afecta a las filiales. No se puede comunicar de la corporación sin conocer la casuística nacional. Por eso la localización es muy importante”. En su caso ha optado por comprometerse con un blog que actualiza puntualmente y que es seguido por más de 15.000 personas al mes. “Es una herramienta tremendamente fresca y potente pero difícil de alimentar. Por eso, los mandos intermedios han de liderar esa comunicación”.
Además de la distancia, hablando de comunicación el idioma sigue siendo nuestra principal barrera. Desde Indra se explicó así: “Decidir que el idioma común es el inglés ya imposible y nos inventamos otros como el portuñol… ¡y funcionan!, pero no por email. Tenemos que seguir invirtiendo mucho en idiomas”.
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